Actualizado 10/02/2014 18:08

La traducción para extraditar a Pizzolato costará 239.000 dólares

SAO PAULO, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -

   La traducción de la sentencia judicial que condenó a Henrique Pizzolato le costará al Ministerio Público Federal de Brasil 239.324 dólares. Un trámite imprescindible para lograr la extradición del que fuera director de marketing del Banco de Brasil.

   El Gobierno brasileño debe costear la traducción jurada de la sentencia del juicio de 'Mensalao', en el que Pizzolato fue condenado a doce años y siete meses de prisión por delitos de corrupción, crimen organizado y blanqueo de capitales. El mismo tribunal también declaró culpable al ex director de un delito de falsedad documental, ya que cuando fue detenido en Italia usaba un pasaporte falso.

   El periódico brasileño 'Folha de Sao Paulo' solicitó presupuesto para esta traducción a la empresa que realiza estos trámites a los organismos públicos y constató que traducir las 8.405 páginas de la sentencia costará 577.000 mil reales (239.324 dólares).

   Tal y como explica la empresa, el elevado precio se debe al tamaño del documento y a que el plazo para concluir el servicio es de 40 días.

   Según informa el Ministerio Público a 'Folha', la traducción del documento ya ha comenzado, aunque no concretan si lo están realizando funcionarios del Gobierno o terceros.

ORDENADORES Y TABLET

   Los dos ordenadores y una tablet encontrados el pasado miércoles en la casa de Pizzolato, en Maranello (Italia), serán examinados por la Policía Federal de Brasil, después de que lo haga la Policía italiana.

   Los rumores que alertaban de que el ex director había huido a Italia con un pen drive que contenía información sobre la campaña electoral de 2002 de Luiz Inácio Lula da Silva no fueron confirmados por la Policía italiana, según informa 'Folha'.

   Hasta el momento, la Policía italiana se ha centrado en investigar los documentos falsos encontrados en la casa de Pizzolato y será ahora cuando comience a examinar los ordenadores, según anunció el coronel de la División de Cooperación Internacional de la Policía Italiana, Francesco Fallica.