SAO PAULO, 31 Ago. (Notimérica/EP) -
La candidata socialista a la Presidencia brasileña, Marina Silva, se ha visto envuelta en la polémica al ser retirados los puntos de su programa electoral referentes al matrimonio gay. En dicho programa la candidata manifestaba su apoyo para legalizar las uniones civiles entre personas del mismo sexo.
Así, como recoge el diario 'O Globo', los párrafos en los que desarrollaba el respaldo a las uniones homosexuales han sido alterados. El extracto suprimido concretamente daba detalles sobre el "casamiento civil igualitario" y a "la aprobación de leyes que garanticen ese derecho".
Para Marina Silva este cambio se debe a una "corrección" sobre una expresión que apareció erróneamente publicada en el programa. La expresión usada pertenece a movimientos sociales y coordinadores detrás de su programa, ha asegurado la candidata. Así, Silva ha negando categóricamente un cambio de opinión sobre la legalización del matrimonio gay.
Los responsables de campaña del Partido Socialista (PSB) en un intento por esclarecer el asunto han enviado una nota de prensa, en ella explican que dichos puntos electorales "no retrataban con fidelidad los resultados del proceso de discusión sobre ese tema en la formulación del programa de Gobierno".
No obstante, pese a la polémica el PSB ha querido reforzado su compromiso social afirmando que en la corrección del programa electoral "permanece intocable el compromiso irrestricto" de la candidata "con la defensa de los derechos civiles".
Otras fuentes apuntan a que Marina Silva, ferviente evangelista, podría haber sufrido presiones determinantes para la supresión de ese punto de su programa electoral.
El fallecimiento del líder socialista Eduardo Campos en un accidente aéreo el 13 de agosto ha dado un vuelco a la campaña presidencial en Brasil. Así, Silva ha pasado en apenas unas semanas de ser una discreta aspirante a la Vicepresidencia por parte del Partido Socialista Brasileño (PSB) a asumir la responsabilidad plena de la candidatura, con unas perspectivas electorales que la sitúan como potencial rival de Dilma Rousseff en las próximas elecciones.