Actualizado 22/02/2014 10:48

La unificación de la doble moneda en Cuba es "irreversible"

Un oficina trabaja en un centro de cambio de divisas en Hong Kong
Foto: REUTERS

MADRID, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

   El vicepresidente de Cuba, Marino Murillo, ha afirmado que el proceso para la unificación monetaria en Cuba --que pondría fin al sistema de doble moneda-- es "irreversible", durante su participación en el XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC).

   "Hoy tenemos en Cuba dos monedas y dos políticas cambiarias y hay que eliminar esa situación, es algo que no tiene alternativa en aras de ordenar nuestras finanzas", ha apostillado el dirigente cubano. En Cuba circula el peso cubano, con el que suele operar la población local, y el peso convertible, equivalente al dólar --unos 24,5 pesos cubanos--.

   En un acto que ha tenido lugar en el Palacio de Convenciones, Murillo ha explicado que la adopción de un paso como la unificación del dinero nacional, implica "estudiar cada aspecto", con el objetivo de "no afectar sensiblemente a la población, ni beneficiar desmesuradamente al extranjero" que llega al país.

   En este sentido, señala que, aunque la medida financiera "no resolverá todos los problemas", el simple hecho del incremento de la producción "podrá ir dando al dinero cubano su verdadero valor y poner las cosas en su justo lugar", según declaraciones recogidas por la Agencia Cubana de Noticias (ACN).

UN PROCESO LENTO

   El pasado mes de octubre, Cuba anunciaba que eliminará gradualmente el sistema de dos monedas que usa desde hace una casi una década como parte de las reformas para mejorar su economía socialista.

   "Ha sido acordado por el Consejo de Ministros poner en vigor el cronograma de ejecución de las medidas que conducirán a la unificación monetaria y cambiaria", informaba Granma, el diario del gobernante Partido Comunista.

   La unificación monetaria es el último intento del presidente Raúl Castro por modernizar la economía socialista de Cuba, que incluye permitir la aparición de pequeñas empresas privadas y reducir el peso del Estado en la economía.

   Según economistas, la unificación monetaria podría demorar hasta 18 meses y consistiría en una devaluación del CUC y quizás una apreciación del peso.