Actualizado 28/08/2014 17:35

Joaquín Sabina en Chile revive los días de sus '500 noches'

Joaquín Sabina
Foto: REUTERS

SANTIAGO, 28 Ago. (Notimérica/EP) -

   El cantautor español Joaquín Sabina ha regresado a Chile para una actuación ante 9.000 personas confirmando que el interprete de Jaén sigue con fuerzas para agarrarse a la guitarra y relatar sus historias, recordando en esta ocasión su obra más celebrada '19 días y 500 noches', álbum que cumple ahora 15 años de su edición.

   Actualmente sabemos de muchas bandas de viejos rockeros que salen de nuevo en giras mundiales, bien por recaudar, bien por nostalgia o una mezcla de ambas. Sabina es de los pocos cantautores que se deciden a esta continuación de sus carreras.

   El último de sus espectáculos ha sido en Chile. En el Movistar Arena, Sabina entonó este miércoles sus clásicos. En esta ocasión se ha presentado sin su colega Joan Manuel Serrat, con quien ha compartido buena parte de sus últimas giras. Se ha notado el cambio, en especial en sus retomados aires bohemios.

   Una ovación entusiasta de sus seguidores chilenos le esperaban a su salida a las 21.15 de este miércoles. Empezó con 'Ahora que', con un tono en clave de rock y blues que refrescaba el clásico. Para seguir con '19 días y 500 noches' se quitaba de encima rápido el 'hit' con aires de rumba mientras seguía el orden marcado en el disco.

   Sin embargo, no interpretó 'Dieguitos y Mafaldas' y explicó que se trataba de un tema que pertenecía a 'Boca y yo soy de Colo Colo' en referencia a los equipos de fútbol argentino y chileno respectivamente. Con ello dividió a los espectadores, pero resolvió con su característica ironía: "Yo en cada lugar digo lo que creo que conviene a mi carrera".

   En cambio, no faltó 'Una canción para la Magdalena', con la recepción más entusiasta de la noche que, sin embargo, tuvo un cierto contraste con "El caso de la rubia platino", que tuvo una fría acogida, a pesar de que Sabina la definió como "lo mas rockero que podía hacer en esos años". Pero dio más impresión de tema de relleno de la noche cuando la dejó en manos de su guitarrista que recogió el protagonismo.

   Lo encauzó con el bis de 'Y sin embargo' y añadió el mayor guiño de la noche a su audiencia chilena con 'Violetas para Violeta', obvia referencia al (anti)poeta chileno Nicanor Parra, una noche en la que tampoco faltaron referencias a Pablo Neruda o Antonio Skármeta.

   Los fans de Sabina quedaron satisfechos. Joaquín sigue respirando rebeldía y esa pasión por contar historias con la voz rota o casi sin voz. Es mayor Sabina, que atendiendo a sus letras tampoco ha sido joven.