Por Tim Hanlon
BARCELONA, 16 mayo, 16 May. (Reuters/EP) -
- El Atlético de Madrid fue el flagelo del Barcelona la pasada temporada, pero el entrenador de los catalanes, Luis Enrique, dice que no buscarán vengarse cuando visiten el Vicente Calderón el domingo, en un partido donde podrían ser campeones de Liga.
El Barça mantiene una ventaja de 4 puntos en el liderato a falta de dos partidos, y sería campeón si derrotase al Atlético, independientemente de lo que haga el Real Madrid en el partido que esa jornada le enfrenta con el Espanyol en Barcelona.
Sería el primer título importante de Luis Enrique como entrenador del Barcelona desde que llegó al club a finales de la pasada temporada.
Su equipo aún está en busca del triplete, gracias a la forma espectacular que han demostrado en la segunda mitad de la temporada, liderada por el tridente letal que conforman Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar.
El Atlético se proclamó campeón el año pasado en el último encuentro, disputado en el Camp Nou ante el Barcelona, en el que se jugó el título a un partido con el equipo catalán en el final de una temporada memorable, en la que también eliminaron a los blaugrana en Liga de Campeones.
"No hay ningún sentimiento de venganza entre los jugadores. El Atlético fue el justo campeón e hizo una gran temporada. Fue única, y esta es totalmente diferente", dijo el entrenador del Barça en rueda de prensa.
"No estamos buscando la venganza, para nosotros la posibilidad de ganar el título es suficiente motivación", agregó.
El equipo ha mejorado con Luis Enrique. Los culés ganaron el campeonato hace dos años, pero la pasada temporada, con Gerardo Martino al mando, no pudieron levantar ningún trofeo importante.
Ahora, tienen la posibilidad de reeditar el triplete que lograron en 2009.
"Sabemos que podemos seguir y hacer algo que el club sólo ha conseguido una vez en su historia", dijo Luis Enrique.
"Creo que tiene mucho mérito lo que hemos hecho para llegar hasta este punto y desde aquí, aún queda mucho, los jugadores son realistas", agregó.
El Barcelona eliminó al Atlético de la Copa del Rey, y les derrotó en liga, pero su entrenador es muy consciente del peligro que suponen sus oponentes del próximo domingo.
El Atlético está peleando por la tercera posición en la tabla, con una ventaja de cuatro puntos sobre el Valencia, cuarto.
"Hemos hecho tres buenos partidos contra ellos, pero en casa son un equipo muy fuerte. Será un partido trampa para nosotros", dijo.