MADRID, 22 nov (Reuters/EP) -
Si en mayo del 2005, cuando Lionel Messi marcó su primer gol en la liga española con la camiseta del Barcelona a los 17 años, alguien hubiera dicho que en menos de una década el pequeño atacante iba a batir el récord de 251 tantos de Telmo Zarra, lo habrían catalogado de temerario o incluso de loco.
Pero Messi, de 27 años, logró el sábado esta notable marca al anotar tres goles en el triunfo del elenco culé como local ante el Sevilla.
Zarra sumó sus 251 tantos en 15 temporadas hasta 1955, mientras que a Messi le tomó una década superar al prolífico atacante vasco. Una de las claves para lograrlo fue que en la temporada 2011-12 marcó 50 tantos.
En su camino a lograr el récord, el capitán de la selección argentina pulverizó las marcas de figuras como el mexicano Hugo Sánchez (234 goles), Raúl (228), Alfredo Di Stéfano (227) y César Rodríguez (226). Además, tiene muchas temporadas por delante para seguir acrecentando sus cifras y su estatus de figura histórica.
Una mirada rápida a los números muestra que el ratio de gol por partido de Messi solamente es superado por Zarra, quien sumó sus 251 goles en 277 encuentros, mientras que el argentino necesitó 289 para superar el récord.
Y la diferencia con sus seguidores es abismal. Sánchez marcó sus 234 goles en 347 partidos, Raúl necesitó 550 encuentros para sumar 228 tantos y Di Stéfano jugó 329 veces para gritar 227 veces.
Cualquiera que haya visto jugar a Messi sabe que puede hacer cosas con la pelota en sus pies que desafían las leyes de la física. Y además, el argentino no parece un típico centrodelantero goleador.
La mayor parte de los otros jugadores que están en lo más alto de la tabla histórica de goleadores son jugadores de área, delanteros clásicos, mientras que Messi suele pasar mucho tiempo con el balón en sus pies y su gambeta en velocidad y capacidad para superar rivales es impresionante.
"Messi tiene algo mágico cuando la pelota toca sus pies. Es como si aterrizara en un colchón de plumas", dijo hace un tiempo el ex entrenador del Manchester United Alex Ferguson.
Comparar el estilo de juego de Messi con el de algunos de esos ex futbolistas es muy complicado ya que hay relativamente pocas imágenes de televisión de Zarra, Di Stéfano o César.
Di Stéfano, quien murió hace pocos meses a los 88 años, es quizás el jugador más completo entre los máximos goleadores históricos de la liga española, al punto de ser señalado como uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos.
"UN GENIO"
Uno de los momentos más recordados en la carrera de Zarra es el gol que marcó con la selección española en el triunfo 1-0 sobre Inglaterra en el estadio Maracaná de Río de Janeiro en el Mundial de 1950.
Décadas después, ese estadio se convirtió en el escenario de la mayor decepción en la carrera de Messi, la derrota de Argentina 1-0 ante Alemania en la final del Mundial en julio.
Una filmación en Youtube muestra a Zarra marcando el único gol del partido muy cerca de la línea de meta, el típico movimiento de un goleador como Gerd Müller o Miroslav Klose.
Messi ha marcado muchos goles de esta manera pero a diferencia de César, conocido por su juego aéreo, raramente anota de cabeza. Además, buena parte de sus conquistas se han dado tras su clásica corrida de derecha a izquierda paralela al área y un remate rasante.
Los defensores quedan desarmados cuando Messi gambetea, y una vez que encuentra espacios, sus remates raramente salen desviados.
"Messi es un genio", dijo Franz Beckenbauer, campeón mundial como jugador y entrenador de la selección alemana.
"Tiene todo. Cuando lo veo, me encuentro con un jugador muy habilidoso, de gran inteligencia y con una pie izquierdo como el de Diego Maradona".