Actualizado 23/01/2017 23:19

Las perspectivas económicas del FMI sobre los países latinoamericanos

Alejandro Werner
REUTERS

   MADRID, 23 Ene. (Reuters/Notimérica) -

   Según las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI), la economía de México entra en un terreno difícil tras la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, mientras que la actividad productiva de Brasil apenas comenzará a estabilizarse tras la peor recesión de su historia.

   El director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner, planteó un panorama cauto en el que reiteró con más detalles las proyecciones para la región, México y Brasil, que ya había adelantado la semana pasada.

   "Las perspectivas (para México) están empañadas por la incertidumbre en torno a la política comercial de Estados Unidos, la cual, sumada a las condiciones financieras más restrictivas, frenará la actividad económica", indicó el organismo.

   La economía mexicana, que ya venía con un repunte flojo del impacto de la crisis global de 2008-2009, sufrió un revés en 2016 cuando Trump irrumpió en las elecciones de Estados Unidos. El peso se depreció y presionó a la inflación, al tiempo que las inversiones se congelaron por las dudas sobre el panorama.

   Trump y su Gobierno han ratificado los planes de construir un muro fronterizo y aplicar un impuesto a las importaciones mexicanas para garantizar la seguridad y el empleo de los estadounidenses, pero aún no se conocen detalles de las iniciativas, que podrían quedar más claras esta semana.

   En una conferencia para presentar el reporte del FMI, Werner dijo que "en la medida que se vaya generando mayor información sobre las dimensiones (de lo que) se va a estar negociando, muy probablemente esta incertidumbre disminuya y el impacto sobre la actividad económica en 2017 pudiese amortiguarse".

   El informe del Fondo señaló que para mantener la confianza del mercado y situar la deuda pública en una trayectoria descendente, México debería perseverar en la consolidación fiscal. También señaló que el endurecimiento monetario del banco central ayudaría a contener las expectativas inflacionarias.

DESEMPLEO ALTO EN BRASIL

   En Brasil, donde el Gobierno del presidente Michel Temer promueve un plan de austeridad fiscal para recuperar la fe de los inversores ante graves denuncias de corrupción, el FMI habló de "una demora en la recuperación económica porque el gasto privado sigue siendo débil".

   Temer aseguró este mes en una entrevista con Reuters que su prioridad será la creación de empleo a medida que la economía se recupera, descartando especulaciones respecto de que un escándalo de corrupción vaya a obstaculizar las reformas laborales y de pensiones.

   Pero el Fondo indicó que "los altos niveles de desempleo y de endeudamiento del sector privado continuarán imponiendo un lastre a la demanda".

   De todos modos, Werner sostuvo que "claramente tenemos una visión sólida y confianza de que las medidas que se han implementado en Brasil en los últimos doce meses van a llevar a que materialmente la economía deje de contraerse".

   El tono del FMI para Argentina fue algo más optimista, por más que sus cálculos de la evolución del PIB para el año pasado y 2017 fueron revisados a la baja.

   "La continuidad del ajuste macroeconómico y los avances en el fortalecimiento del marco institucional ayudarán a apuntalar la confianza de los inversionistas en las metas fiscal y monetaria y a propiciar un repunte de la inversión privada", señaló.

   Werner sostuvo que Argentina "tiene que seguir moviéndose hacia un ámbito regulatorio en la parte microeconómica mucho más moderno, menos intervencionista, de mayor apertura (...) esto va a tener como resultado un impulso a la inversión".

   En cambio, el FMI dijo que Venezuela "continúa sumida en una profunda crisis económica que avanza hacia la hiperinflación" por el déficit fiscal y las restricciones económicas. "Para 2017 se proyecta una marcada contracción de la actividad económica, y se prevé que la inflación continúe acelerándose", agregó.

   En el caso de Colombia, el organismo destacó que el crecimiento se verá afianzado por el acuerdo de paz recientemente firmado y por una reforma tributaria que generará espacio para gastos en infraestructura y programas sociales.

   Respecto de Perú, el FMI sostuvo que "la atención debería centrarse ahora en una consolidación fiscal gradual". Sobre Chile, advirtió de que las inciertas perspectivas regionales, las tasas de interés más altas en el exterior y "la aún escasa confianza interna" podrían poner trabas a una recuperación.