Actualizado 18/01/2017 16:11

El turismo estadounidense en Bolivia desciende un 85% en menos de diez años

Avión Bolivia
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   LA PAZ, 18 Ene. (Notimérica) -

   La cónsul estadounidense en Bolivia, Kimberly Atkinson, ha informado de que los turistas de Estados Unidos en el país han descendido de 200.000 a 30.000 viajeros al año de 2007 a 2016, lo que significa un descenso del 85 por ciento.

   "Antes de 2007 había más de 200.000 turistas de Estados Unidos entrando a Bolivia cada año. El año pasado, había 30.000, y eso para mí es triste, porque queremos que haya más intercambios culturales", ha afirmado Atkinson en una entrevista al canal 'ATB'.

   El motivo de este descenso tan significativo es la imposición de la visa de ingreso a los ciudadanos estadounidenses. Para solicitar esta visa, no solo es necesario enviar el pasaporte al consulado boliviano más cercano, sino que hay que pagar una tasa de 160 dólares. La tasa también se pueden pagar al llegar a algún punto de ingreso a Bolivia.

   Esta medida, impuesta por el Gobierno de Evo Morales en 2007, es una forma de "castigar" a los estadounidenses, ya que en ese país existe la misma tasa de 160 dólares a los turistas que llegan al país. En palabras de Morales, es una manera de "mostrar dignidad y reciprocidad".

   Aún así, la medida del presidente boliviano parece haber repercutido en la economía del país. Antes, los estadounidenses gastaban unos 80 dólares al día en sus visitas a Bolivia, lo que significa la obtención de 64 millones de dólares al año, solo en turismo estadounidense. Hoy, esa cifra ha caído a los 9,6 millones.

   Por contrapartida, la visita de bolivianos a territorio estadounidense aumenta en unos 65.000 al año, según ha afirmado la cónsul Atkinson.

   Las relaciones entre estos dos países no son solo en materia de turismo. Estados Unidos es el tercer mercado más grande para productos procedentes de Bolivia --tras Brasil y Argentina--. Entre el periodo 2006-2015, Bolivia exportó productos a este país por un valor de 9.324.000.000 dólares. "Queremos seguir mejorando las relaciones de los dos países", ha añadido la cónsul.