Actualizado 01/10/2014 22:03

El hombre acusado por colarse en la Casa Blanca niega todos los cargos

WASHINGTON, 1 Oct. (Reuters/EP) -

   El veterano de la guerra de Irak acusado por haber entrado en la Casa Blanca, el pasado 19 de septiembre, se ha declarado no culpable este miércoles ante un tribunal federal.

   La corte ha ordenado que un perito forense revise el estado mental de Omar González, que sufre de trastorno de estrés postraumático, pero la defensa se ha opuesto a dicha evaluación. El abogado de González, David Bos, ha aclarado que su cliente es mentalmente competente y que no necesitaba una evaluación.

   González fue detenido dentro del recinto de la Casa Blanca con un cuchillo, después de que saltase la valla, entrase por la puerta principal y corriera unos 40 metros en la Sala Este, habitación utilizada para eventos y recepciones. Por ello, ha sido acusado de entrada ilegal portando un arma por un jurado federal.

LLEGÓ A LA PLANTA PRINCIPAL

   Según los últimos datos, González fue más lejos de lo que previamente se pensó, llegando incluso a recorrer buena parte de la planta principal de la residencia presidencial antes de ser detenido, según fuentes del Servicio Secreto consultadas por el diario estadounidense 'The Washington Post'.

   De hecho, una caja de alarma situada cerca de la entrada principal de la Casa Blanca, diseñada para alertar a los guardias de la presencia de un intruso, había sido silenciada.

   Antes de ser interceptado y detenido por uno de los guardias, el intruso logró recorrer parte de la planta principal y llegó hasta la puerta de entrada de la Sala Verde, un salón con vistas al jardín, obras de arte y muebles antiguos, tal y como confirman al citado periódico tres personas familiarizadas con el incidente.

   González tenía más de 800 cartuchos de municiones en su coche y había sido detenido en julio con un fusil de francotirador y un mapa que marcaba la mansión ejecutiva, según anunció el fiscal federal, que cree que podría ser condenado a diez años de prisión por estos hechos.

   Aunque no es la primera vez que una persona salta la valla de la Casa Blanca, sí es la primera que consigue entrar en el inmueble, aunque lo hizo justo después de que el presidente, Barack Obama, y su familia salieran hacia Camp David.