Publicado 24/04/2014 17:24

Transparencia Internacional acusa a UE de complacencia con la corrupción

Por John O'Donnell

BRUSELAS, 24 abr, 24 Abr. (Reuters/EP) -

- Los grupos de presión europeos llevan a cabo gran parte de su trabajo en secreto y hay una complacencia generalizada en Bruselas para abordar la corrupción o los conflictos de intereses, dijo el jueves Transparencia Internacional.

En el primer informe de este tipo, el grupo anticorrupción ofreció una luz poco favorecedora sobre los organismos que redactan y se encargan de que se cumplan las leyes en los 28 países miembros de la Unión Europea (UE), concluyendo que su falta de interés podría llevar a más escándalos de corrupción.

Las críticas a instituciones como el Parlamento Europeo, que los investigadores dijeron que había rechazado cooperar con el estudio, pueden proporcionar más munición a los euroescépticos, que parecen encaminarse a conseguir más apoyo en las elecciones regionales de mayo.

"Las normas para impedir la corrupción o los conflictos de intereses existen, pero nunca se aplican", dijo Carl Dolan, uno de los expertos implicados en el estudio.

"Hay un ambiente de complacencia en Bruselas en la forma, por ejemplo, en que se comprueban y sancionan los conflictos de intereses", añadió. "A menudo se reduce a un trabajo mecánico en el que las declaraciones no son verificadas (...) No hay un comité independiente que supervise las normas", dijo.

Transparencia Internacional indicó que este enfoque laxo de la Comisión Europea y otras instituciones era especialmente arriesgado, dado que no hay registros adecuados en Bruselas de los grupos de presión o de aquellos con quienes tienen contacto.

Buena parte del proceso de crear leyes en Europa, incluida la reforma del sistema bancario, está envuelto en conversaciones entre diplomáticos y legisladores sin que exista registro público de quiénes acudieron o qué dijeron, señalaron.

"Las leyes importantes se acuerdan en reuniones secretas, donde no hay registro público de lo que ha ocurrido", dijo Dolan.

En su reporte de 240 páginas, Transparencia Internacional recomendó crear un registro obligatorio de los más de 15.000 grupos de presión en Bruselas y de cómo influyen en la legislación, y la realización de controles independientes para evitar conflictos de intereses.

Las recomendaciones llegan después de que John Dalli se viera forzado a dimitir como comisario sanitario el año pasado, cuando su adjunto fue acusado de pedir 60 millones de euros a la firma Swedish Match a cambio de ayuda de Dalli para influir en la legislación europea sobre tabaco.

(Traducido en la Redacción de Madrid; Editado en español por Ana Laura Mitidieri)