Actualizado 06/07/2015 07:50

Tregua en Gaza se mantiene mientras la atención se centra a largo plazo

Por Nidal al-Mughrabi y Jeffrey Heller

GAZA/JERUSALÉN, 27 ago, 27 Ago. (Reuters/EP) -

- La tregua indefinida en la guerra de Gaza entre Israel y los palestinos se mantenía el miércoles mientras el primer ministro Benjamin Netanyahu afrontaba duras críticas en los periódicos del país por una campaña en la que no emergió un claro vencedor.

En las calles del golpeado enclave palestino gobernado por Hamas, la población se dirigía a tiendas y bancos, tratando de reanudar el ritmo de vida normal tras siete semanas de combates.

En Israel, las sirenas que advierten de un inminente ataque de cohetes desde la Franja de Gaza permanecieron en silencio, pero los comentaristas de medios de comunicación expresaron su profunda decepción con el liderazgo de Netanyahu durante el estallido más prolongado de violencia entre israelíes y palestinos en una década.

"Después de 50 días de combates en los que una organización terrorista mató a decenas de soldados y civiles, destruyó la rutina diaria (y) situó al país en un estado de dificultad económica (...) podríamos haber esperado más que el anuncio de un alto el fuego", escribió el analista Shimon Shiffer en Yedioth Ahronoth, el diario más vendido de Israel.

"Podríamos haber esperado que el primer ministro fuera a la residencia del presidente y le informara de su decisión de dimitir", añadió.

Netanyahu, que ha afrontado constantes críticas de miembros de ultraderecha de su gobierno de coalición que demandan una acción militar para derrocar a Hamas, no comentó de forma inmediata el acuerdo de tregua mediado por Egipto, que entró en vigor el martes por la noche.

Funcionarios de salud palestinos dicen que 2.139 personas, la mayoría civiles, entre ellos más de 490 niños, han muerto en el enclave desde el 8 de julio, cuando Israel inició una ofensiva con el objetivo declarado de acabar con el lanzamiento de cohetes.

La cifra de muertos israelí se mantiene en 64 soldados y seis civiles.

Israel dijo que asestó un fuerte revés a Hamas, matando a varios de sus líderes militares y destruyendo los túneles de infiltración transfronterizos del grupo islamista.

Pero Israel también tuvo que hacer frente a un persistente lanzamiento de cohetes durante casi dos meses que causó el éxodo de una serie de comunidades fronterizas y se convirtió en parte de la vida diaria en su corazón comercial.

El acuerdo de alto el fuego pidió un cese indefinido de las hostilidades, la apertura inmediata de los cruces bloqueados en Gaza con Israel y Egipto y la ampliación de la zona de pesca del territorio en el Mediterráneo.

Un funcionario de alto rango de Hamas expresó la voluntad de que las fuerzas de seguridad del presidente palestino Mahmoud Abbas, que cuenta con el respaldo Occidente, y el gobierno de unidad que formó en junio controlen los puntos de entrada.

Tanto Israel como Egipto consideran a Hamas una amenaza para la seguridad y piden garantías de que no entrarán armas en el territorio donde viven 1,8 millones de personas.

En una segunda fase de la tregua que podría empezar dentro de un mes, Israel y los palestinos abordarán la construcción de un puerto marítimo en Gaza y la liberación por parte de Israel de prisioneros de Hamas en la ocupada Cisjordania, posiblemente a cambio de dos soldados que se cree estarían en poder del grupo islamista, dijeron los funcionarios.

(Información adicional de Ari Rabinovitch en Jerusalén; Escrito por Jeffrey Heller. Traducido por la Redacción de Madrid; editado por Carlos Aliaga vía Mesa Santiago)