MÉXICO DF, 27 May. (Notimérica/EP) -
Los principales líderes y portavoces de los ya extintos grupos de autodefensa de Michoacán, así como otros representantes sociales, se resisten a creer que el movimiento civil armado que encabezaron para luchar contra el crimen y la impunidad en la entidad ha acabado y por ello, este miércoles, abogarán, con motivo de su primer encuentro conmemorativo, por que el resto de mexicanos sigan el camino que ellos mismos tomaron hace un año contra la violencia en la región.
"Muchos de nosotros ya nos estamos defendiendo por nuestra cuenta y queremos lanzar un movimiento fuerte y plural para todo el país con un denominador muy claro: defendernos todos entre todos, porque el Gobierno no lo está haciendo", ha defendido el padre Alejandro Solalinde, conocido por su incansable labor humanitaria en favor de los Derechos Humanos, que más de una amenaza de muerte le ha costado ya.
El sacerdote ha explicado que la experiencia de Michoacán puede ser trasladada a otras regiones de México pero sin que la población tenga necesariamente que armarse. El modelo, ha asegurado, puede sufrir modificaciones, pero siempre, basándose en el concepto de "protección ciudadana".
Solalinde, en conversación con el diario mexicano 'Milenio', ha comentado que si bien respeta la decisión de los habitantes de Michoacán de levantarse en armas contra Los Caballeros Templarios hace ya casi un año, el objetivo de este encuentro, que tendrá lugar en Ciudad de México, no es incitar a la lucha armada, sino la búsqueda de otras alternativas de autoorganización de seguridad ciudadana.
"Nos podemos defender de muchas formas, con las redes sociales, a través de la prensa, apoyándonos mutuamente", ha enumerado el sacerdote, quien encabezará junto a otras figuras de la Iglesia, la política o las propias autodefensas, una conferencia en este sentido en la capital del país.
En ese sentido, y apelando a la Constitución, el senador del Partido Acción Nacional (PAN) Ernesto Ruffo, ha defendido la legitimidad que supone protegerse uno mismo cuando el Estado y el Gobierno se muestran incapaces de hacerlo, más, ha explicado, cuando a lo largo de los últimos años, se ha producido una "descomposición de la seguridad" en todo el país.
Sin embargo, otros como el general José Francisco Gallardo han sido más expeditivos y han asegurado que "no tienen que pedirle permiso a nadie para defenderse", al mismo tiempo que ha valorado la legitimidad que existe en "tomar las armas" dentro de las instituciones para la defensa tanto del país como de sus ciudadanos.
"TODOS SOMOS AUTODEFENSAS"
En cuanto a la presencia de los grupos de autodefensa en el acto, cabe destacar la presencia del que fuera uno de sus portavoces, José Manuel Mireles, y la del jefe de las policías comunitarias de La Ruana, el recién excarcelado Hipólito Mora, en libertad después de no haberse encontrado pruebas que le incriminasen de alguna forma en el doble asesinato del que se le acusaba y por el cual pasó varios meses en prisión preventiva.
"Queremos que escuchen lo que le vamos a decir al país desde nuestra experiencia", ha manifestado Mireles, una de las presencias más destacadas del acto que tendrá por lema 'Todos Somos Autodefensas', el cual se llevará a cabo entre estrictas medidas de seguridad puesto que muchos de sus participantes cuentan con un amplio historial de atentados y amenazas en su contra por su activismo social.
Mireles y Mora son algunos de los miembros de los grupos de autodefensa que todavía no han ingresado en las Fuerzas Rurales, a diferencia de otros líderes como Estanislao Beltrán, que las autoridades de Michoacán presentaron hace unas semanas para regularizar a aquellos ciudadanos que por cuenta propia luchaban contra el crimen organizado en la entidad.
La concentración consistirá en la exposición de alternativas y acciones para, desde el ámbito ciudadano, enfrentarse a la violencia que azota no solo a Michoacán, sino también casi a la totalidad del territorio mexicano. Entre los presentes, además de las personalidades ya mencionadas, también participarán en el encuentro, el obispo de Saltillo, Raúl Vera; el que fuera alcalde del municipio de García, Jaime Rodríguez; y Mario Segura, periodista secuestrado hace unos años por Los Zetas.