Actualizado 08/07/2015 04:56

Miles de campesinos marchan en Ciudad de México contra la reforma energética

Por Noe Torres

MEXICO DF, 23 jul, 23 Jul. (Reuters/EP) -

- Miles de campesinos marcharon el miércoles en la capital de México en rechazo a una reforma recién aprobada, que permite una mayor apertura del sector energético a empresas privadas, y que consideran que es una amenaza para sus tierras.

La controvertida reforma, cuyos trazos finales están siendo debatidos en el Congreso, permitirá tanto a la estatal Pemex como las empresas privadas ocupar temporalmente los terrenos donde sea posible extraer gas y petróleo, según el texto de una de las leyes de la reforma.

"La legislación que se está discutiendo en el Congreso amenaza con despojar a muchos ejidatarios y comunidades indígenas de la propiedad de sus tierras", dijo a una emisora de radio, Alfonso Ramírez, líder de El Barzón, una de las agrupaciones que participaron en la concentración.

Gritando consignas como "(presidente Enrique) Peña Nieto, entiende, el campo no se vende" y "Aquí y allá, la lucha seguirá" los agricultores caminaron por el Paseo de la Reforma, una de las principales arterias de la ciudad, llevando tractores y una banda musical.

"Es lo único que tenemos", dijo Pedro Morales, un productor rural de 55 años que siembra trigo y maíz en un ejido del central Estado de México. "Si nos quitan de ahí, nos quedamos sin la tierra que heredamos de nuestros abuelos", agregó.

Los ejidos son un tipo de propiedad colectiva de la tierra creada tras la revolución de 1910 por la cual los campesinos pueden hacer usufructo de la superficie.

Los agricultores, procedentes de varios estados del país, enarbolaban pequeñas banderas e improvisadas pancartas en las que rechazaban la reforma y exigían más apoyo para su empobrecido sector, que representa apenas un 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

"Diputados y senadores, defiendan al campo", "Basta de hambre" y "Beneficien a los pobres, no a los ricos", decían algunos de los cartelones que portaban los preocupados manifestantes.

"Uno no tiene más que su machete y su tierra para trabajar, pero si se lo invaden a uno ya no se puede hacer nada para vivir", dijo José Hernández, un campesino de 52 años del estado de Veracruz, uno de los principales productores de petróleo en México.

La reforma energética ha sido criticada duramente por la izquierda que asegura entregará a manos extranjeras el sector petrolero, una industria vital para las finanzas del país.

El petróleo que produce la estatal Pemex es una de las principales fuentes de ingresos del Gobierno.

El proyecto es la piedra angular de un paquete de reformas estructurales con las que el Gobierno promete impulsar el magro crecimiento de la segunda mayor economía de América Latina, pero especialistas piensan que tardará algunos años en rendir frutos.

(Con reporte adicional de Luis Rojas)