Actualizado 16/09/2014 04:44

Al menos 14 familiares de Varela ocupan altos cargos del Gobierno

Juan Carlos Varela
Foto: REUTERS

CIUDAD DE PANAMÁ, 16 Sep. (Notimérica/EP) -

   Al menos catorce familiares del actual presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, han pasado a ocupar altos cargos en el Gobierno tras la toma de posesión de su pariente, que tuvo lugar el pasado 1 de julio de 2014, con salarios superiores a los 4.000 dólares mensuales.

   De acuerdo con una investigación realizada por la alianza informativa que integran Epasa, NexTV y KW Continente --publicada en el diario Panamá América--, los catorce familiares de Varela dentro del Gobierno suponen al Estado más de 102.245 dólares en salarios y otras prestaciones laborales al mes, o lo que es lo mismo, más de 1,3 millones de dólares en un año.

   Según el reportaje, hasta la fecha Varela "ha colocado en el Gobierno al menos a catorce familiares directos, les ha asignado altos cargos y con los mejores salarios de la administración pública". Entre ellos se encuentran primos, esposas de primos y sobrinos, tías políticas, cuñadas, consuegras de sus hermanos, entre otros parientes.

   Entre las designaciones de familiares directos de Varela destaca la de su prima Gloria de la Torre como embajadora en Francia, con un salario de 7.000 dólares mensuales más honorarios; o su primo Carlos Rodríguez, que es el asesor del Aeropuerto de Tocumen, ganando 10.000 dólares al mes, entre otros.

   El presidente de Panamá --a través de un comunicado de su portavoz--, se limita a responder que ningún hermano o sobrino de él o de su esposa está trabajando en la administración pública. Además, ha explicado que "si hay alguna persona con un nivel de consanguinidad que está laborando en una institución es por sus méritos profesionales y no por un tema de nepotismo".

   Estos presuntos nombramientos 'a dedo' chocarían con las promesas de Juan Carlos Varela cuando era candidato presidencial en la pasada campaña electoral. En aquel momento, prometió implementar un mecanismo de selección por méritos para la designación de los funcionarios.

   De la misma forma, en su programa se apostaba por "incentivar a los profesionales de la carrera diplomática dándoles oportunidad en su gobierno". Para abogados y dirigentes de la sociedad civil, sin embargo, se trata de contrataciones que riñen con la ética.