Actualizado 02/07/2015 03:18

Las autoridades habían revocado el pasaporte al joven que arrolló a los dos militares

El autor del ataque se convirtió al islam hace un año y habría dicho a la Policía que actuaba en nombre de Alá

OTTAWA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades federales de Canadá habían revocado el pasaporte al joven que arrolló este lunes a dos soldados, matando a uno, y le estaban vigilando ante la sospecha de que éste se hubiera radicalizado, según informan los medios locales.

El autor del atropello, que murió por disparos de la Policía el lunes por la noche, ha sido identificado como Martin Rouleau. El joven fue abatido a tiros el lunes tras arrollar a los dos soldados en un aparcamiento de un centro comercial en Saint-Jean-sur-Richelieu, una localidad situada unos 40 kilómetros al sureste de Montreal.

Según 'La Presse', las autoridades federales le habían retirado el pasaporte hace unas semanas, ante el temor de que pudiera viajar a Irak o Siria para unirse al grupo yihadista Estado Islámico.

Asimismo, ha señalado, citando fuentes policiales, que durante su huida tras el atropello, Rouleau habría realizado una llamada a la Policía asegurando que actuaba en nombre de Alá.

Tras atropellar a los soldados, el joven se dio a la fuga pero su vehículo fue avistado por la Policía local, que le persiguió durante cuatro kilómetros. Finalmente, el asaltante perdió el control de su coche y cayó en una zanja. El joven salió del vehículo, al parecer blandiendo un cuchillo, y los agentes abrieron fuego.

VINCULADO CON "IDEOLOGÍA TERRORISTA"

El Gobierno canadiense ha confirmado hoy que el ataque está vinculado con la "ideología terrorista". El ministro de Seguridad Pública, Steven Blaney, ha opinado desde el lugar de los hechos que lo que ocurrió está "claramente vinculado con la ideología terrorista".

Según el ministro, es un "sombrío recordatorio" de los sacrificios que hacen las fuerzas de seguridad canadienses. "Este es un terrible acto de violencia contra nuestro país, contra nuestro Ejército y contra nuestros valores", ha opinado.

La Real Policía Montada de Canadá (RCMP) está cooperando con la Policía provincial de Quebec en la investigación de los hechos y las agencias de seguridad federales están "supervisando la situación", ha precisado.

El responsable de Seguridad Nacional de la RCMP, Martine Fontaine, ha señalado que Rouleau fue detenido previamente, cuando intentó tomar un vuelo hacia Turquía y añade que había sido entrevistado expresamente en julio después de que miembros de su familia expresasen su preocupación.

En cualquier caso, Fontaine ha señalado, en declaraciones a los medios de comunicación que recoge la cadena CBC, que la Policía canadiense "no puede arrestar a alguien solo por tener pensamientos radicales", según informa la agencia Reuters.

Anoche, la Policía Montada ya había apuntado a que el joven se había "radicalizado" tras convertirse al islam hace aproximadamente un año. "Este individuo era conocido por las autoridades federales, incluido nuestro equipo integrado de investigadores de seguridad nacional en Montreal, que junto con otras autoridades estaban preocupados de que se hubiera radicalizado", afirmó la RCMP en un comunicado.

AHMAD EL CONVERSO

Según Radio Canadá, en su perfil de Facebook el joven se presentaba como Ahmad Le Converti (Ahmad el Converso). En su perfil, Rouleau mostraba su admiración por los vídeos propagandísticos y otros materiales sobre la yihad.

Los investigadores han registrado la casa del padre del joven, Gilles Rouleau. El hombre se ha negado a dar una entrevista a CBC Radio. "He perdido a mi hijo. Mi hijo estaba en todas partes (en los medios esta mañana). Dejadme solo, no tengo comentarios", se ha limitado a decir.

El martes, el combatiente del Estado Islámico Abú Jalid al Kanadi, cuyo apellido significa 'El Canadiense', ha aplaudido el ataque a través de su perfil de Twitter y ha pedido a los musulmanes de Canadá que "sigan los pasos del valiente hermano Martin Rouleau".

Asimismo, ha descrito el ataque contra los militares canadienses como "una venganza" por el anuncio del país norteamericano en el que confirma que se unirá a la batalla contra los milicianos del Estado Islámico en Irak y Siria. Sin embargo, un día después del ataque, ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad.