Actualizado 15/03/2017 14:12

El Senado de Bolivia aprueba el proyecto de ley de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Sustancias Controladas

Hojas de coca
Reuters

MADRID, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Senado de Bolivia ha aprobado este martes el proyecto de ley de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Sustancias Controladas, que sustituye, junto a la Ley General de la Coca, a la legislación existente en el país contra el narcotráfico.

El proyecto de ley aprobado por el Senado contempla el pago de dinero a los informantes, escuchas telefónicas y la incautación de bienes de sospechosos de narcotráfico, según ha informado el diario local 'La Razón'.

El ministro de Economía y Finanzas de Bolivia, Luis Arce, adelantó la semana pasada que el Gobierno establecerá un impuesto a la coca, días después de aprobar la Ley General de la Coca, que regula la extensión de los cultivos para este propósito.

Durante el debate de la recientemente promulgada Ley General de la Hoja de Coca, los cocaleros de Trópico se ofrecieron a pagar un máximo de 50 bolivianos anuales (menos de siete euros), mientras que en la región de Yungas se han negado rotundamente a efectuar cualquier pago.

A finales de febrero, el Gobierno aceptó ampliar la superficie que se legalizará con la nueva en el país, poniendo así fin a un conflicto con el sector de los cocaleros que dejó cerca de 200 detenidos.

Los cocaleros de Yungas iniciaron una serie de manifestaciones para evitar que se aprobara esta legislación, que sólo legalizaba 13.000 hectáreas de coca en La Paz, menos de lo que actualmente tiene esta región, ubicada en el departamento.

Esta misma ley permitía, en su primera versión, que la provincia del Chapare, en el departamento de Cochabamba, mantuviera 7.000 hectáreas, más de lo que alberga actualmente. Según algunos de los cocaleros, esta ley favorecerá a los sectores ilegales.

Tras las negociaciones de ambas partes, el Gobierno ha aceptado ampliar a 14.300 las hectáreas que se legalizarán en La Paz, mientras que en Cochabamba serán 7.700, alcanzando un total de 22.000 hectáreas de cultivo para fines alimentarios, científicos, medicinales y espirituales.