Actualizado 07/09/2017 08:46

Un exministro de Lula acusa al expresidente de aceptar sobornos de la constructora Odebrecht

Lula da Silva
RICARDO MORALES

BRASILIA, 7 Sep. (Reuters/EP/Notimérica).-

El exministro de Hacienda de Brasil Antonio Palocci ha acusado al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva de aceptar sobornos de la constructora Odebrecht, sumándose a una lista de denuncias que amenazan las posibilidades del fundador del Partido de los Trabajadores (PT) de presentarse a las elecciones presidenciales en 2018.

Abogados de Palocci --quien ocupó el cargo bajo el Gobierno de Lula-- han dicho que su cliente informó a los fiscales de que Lula aceptó que Odebrecht comprara terrenos para un instituto en su nombre, una casa de campo en el estado de Sao Paulo y 300 millones de reales (unos 81 millones de euros) para su uso una vez que dejara el cargo.

En respuesta, un portavoz de Lula ha rechazado las acusaciones, asegurando que Palocci, quien fue arrestado hace un año en el marco de una investigación de corrupción, miente y que las ha formulado sin pruebas y con el objetivo de lograr un acuerdo favorable y reducir su condena.

Las acusaciones de Palocci han trascendido apenas un día después de que el procurador general de Brasil, Rodrigo Janot, a Lula y a la tmabién expresidenta Dilma Rousseff junto a otros seis miembros del PT por "organización criminal".

Janot indicó que los ocho miembros del PT, entre ellos Lula da Silva y Rousseff, cometieron crímenes de corrupción, blanqueo de dinero y formación de un cártel en relación con la petrolera estatal Petrobras.

Las imputaciones se derivan de las investigaciones abiertas por el Tribunal Supremo Federal por la 'Operación Lava Jato', y se trata además de la primera vez que se presentan cargos criminales contra Rousseff, apartada del poder en 2016.

Janot sostuvo que los ocho miembros del PT recibieron 1.485 millones de reales (cerca de 400 millones de euros) en pagos ilegales, apuntando a Lula da Silva como "ideólogo" de la organización, según informó el diario local 'O Globo'.

En su documento, indicó que el expresidente habría recibido 230,8 millones de reales (unos 62,1 millones de euros) entre 2004 y 2012 de parte de las empresas Odebrecht, OAS y Schahin con recursos desviados de contratos firmados con Petrobras.

Asimismo, subrayó que esta organización habría actuado entre 2002, cuando Lula da Silva se impuso en las presidenciales, hasta mayo de 2016, cuando Rousseff abandonó la Presidencia a causa de un juicio político.

En el caso de la exmandataria, Janot dijo que habría entrado a formar parte de la supuesta organización criminal en 2003, cuando accedió al puesto de ministra de Minas y Energía.

"Desde allí contribuyó decisivamente para que los intereses negociados en forma de pagos pudieran ser cumplidos, especialmente en el ámbito de Petrobras, de la que fue presidenta del consejo de administración entre 2003 y 2010", señaló .

Los otros seis imputados son la senadora Gleisi Hoffman, presidenta del PT; los exministros Antonio Palocci, Guido Mantega y Paulo Bernardo; el prefecto de Araraquara, Edinho Silva; y el extesorero del PT Joao Vaccari Neto.

Janot reclamó que todos ellos paguen 6.800 millones de reales (alrededor de 1.831 millones de euros), cifra que incluye la devolución del dinero presuntamente desviada y las reparaciones por daños morales y materiales.

La operación 'Lava Jato' se ha convertido en uno de los mayores escándalos de corrupción en el gigante sudamericano. Ha salpicado a decenas de políticos y empresarios y ha dado lugar a la apertura de causas derivadas, como la de Odebrecht, que ya ha cobrado entidad propia.