Actualizado 28/04/2017 14:07

La CIDH advierte de la crítica situación de los DDHH en Venezuela, Cuba y República Dominicana

A hooded demonstrator attends a rally to honour victims of violence during prote
REUTERS/ MARCO BELLO

   MADRID, 28 Abr. (Notimérica) -

   La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), un organismo autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), publicó este miércoles su informe anual de 2016 en el que figuran Venezuela, República Dominicana y Cuba como los tres países donde las violaciones de Derechos Humanos requieren especial atención por parte de dicho organismo.

   Es el Capítulo IV del documento, conocido como la 'lista negra', el que incluye la situación sociopolítica de los países mencionados, escogidos por la CIDH bajo cinco criterios. Entre ellos se encuentran la violación grave de los elementos fundamentales y las instituciones de la democracia, la suspensión ilegítima del libre ejercicio de los derechos fundamentales o la eliminación de garantías constitucionales.

   Asimismo, el documento se centra en denunciar a aquellas naciones que presenten "violaciones masivas, graves y sistemáticas de los Derechos Humanos garantizados por la Declaración Americana o la Convención Americana y demás instrumentos aplicables", junto con la presencia de otras situaciones que afecten el goce y disfrute de los mismos, ya sea "por graves crisis institucionales o el incumplimiento sistemático del Estado con su obligación para combatir la impunidad".

   Cabe destacar que, aunque el informe valore en profundidad el escenario de Venezuela, Cuba y República Dominicana, la CIDH ha querido mencionar la situación en la que se encuentra Colombia en la actualidad, en pleno desarrollo del acuerdo de paz, reconociendo los esfuerzos realizados por el estado para llegar a su firma y renegociación mediante el plebiscito realizado en octubre de 2016 "en respeto del pluralismo efectivo necesario en una sociedad democrática".

    En este caso, la CIDH considera que al país le supone "un gran reto y responsabilidad en la implementación del acuerdo de paz", a la vez que admite que se han llevado a cabo "importantes políticas públicas emprendidas por el Estado en materia de Derechos Humanos para hacer frente a esta compleja realidad", además de que ha dado atención a las víctimas de violaciones de DDHH y la protección de personas en riesgo.

VENEZUELA

   La Comisión ha decidido incorporar al país presidido por Nicolás Maduro debido a la persistencia de "situaciones estructurales que afecten seria y gravemente el goce y disfrute de los derechos fundamentales" de los venezolanos, además de "las omisiones graves (por parte del Estado) para cumplir las decisiones del organismo".

   Durante 2016, la CIDH monitoreó la situación general de los Derechos Humanos en Venezuela que ha derivado en una "grave crisis política, social y económica", destacando en primer término "el agravamiento de la situación de seguridad ciudadana en relación al derecho a la vida e integridad personal". También observó el deterioro del denominado 'Estado de Derecho' y de las instituciones democráticas del país, ya que "continuaron las denuncias sobre la falta de acceso a la justicia y a un poder judicial independiente e imparcial".

   La libertad de expresión y el encarcelamiento de opositores y disidentes, junto con la "represión y las restricciones indebidas al ejercicio de protesta" --como despidos y amenazas a funcionarios con perder su cargo en caso de manifestar su opinión de forma pública contra el Gobierno de Maduro-- se suman al uso del derecho penal y otros controles estatales para castigar o impedir la labor de periodistas que critican su modelo administrativo, obstaculizando el derecho a la información al resto de la sociedad.

REPÚBLICA DOMINICANA

   En esta ocasión República Dominicana sustituye a Guatemala con respecto al informe de 2015, ya que el organismo internacional considera que persiste la problemática estructural relacionada con la discriminación --en especial contra las personas nacidas dentro de las fronteras del país con ascendencia haitiana-- debido a que el Estado no ha respondido a los requerimientos formulados por la CIDH en base a los resultados de 2015.

   No obstante, la Comisión indica que estas desigualdades se vienen manifestando desde 1991, cuando el organismo realizó una visita al país para valorar su situación. Así, considera que se sigue dando "la privación arbitraria de la nacionalidad y la falta de reconocimiento de la personalidad jurídica de las personas afectadas por distintas formas de racismo, que las han puesto en una situación de desventaja en el goce de algunos de sus Derechos Humanos, así como en una situación de extrema vulnerabilidad a ser víctimas de violaciones a otros múltiples Derechos Humanos".

CUBA

   Por otro lado, la problemática cubana radica en la persistencia de "restricciones a los derechos políticos, de asociación, a la libertad de expresión y difusión del pensamiento, la falta de independencia del poder judicial y las restricciones a la libertad de movimiento, que continúan limitando de manera sistemática los DDHH de los habitantes en Cuba", sostiene el informe.

   A pesar de que la Comisión considera que ha "notado la adopción de medidas positivas, particularmente en materia de los derechos políticos, sociales y culturales", mantiene que el Estado cubano continúa restringiendo las actividades de los activistas y defensores de los derechos fundamentales, junto con disidentes y periodistas independientes de la línea oficialista.

   Asimismo, enfoca su análisis en la nula libertad del colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales, Bisexuales e Intersexuales (LGTBI) y en la población afrodescenciente "que está subrepresentada en los altos cargos del Estado" y se encuentra en contextos de exclusión social.