MADRID, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La organización sin ánimo de lucro Solidaridad Sin Fronteras (SSF) ha definido como "lamentable" la decisión de Estados Unidos de poner fin al programa para médicos cubanos --Cuban Medical Professional Parole (CMPP)-- y ha anunciado que está trabajando con varios congresistas de Estados Unidos para que se restablezca.
La decisión de poner fin al 'programa Parole' fue anunciada por el Gobierno de Barack Obama apenas una semana antes de abandonar la Casa Blanca, cuando informó del fin de la política migratoria de 'pies mojados, pies secos', que permite la entrada de inmigrantes cubanos sin visado a suelo estadounidense.
SSF ha señalado que con el fin del 'programa Parole' para médicos cubanos, se ha dejado "en un limbo migratorio" a algunos médicos repartidos por el mundo. "Desde entonces hemos trabajado con varios congresistas, entre ellos el senador Marco Rubio, para resolver este problema", ha explicado el presidente de la ONG, Julio César Alfonso.
En una rueda de prensa celebrada este viernes, ha indicado que se ha logrado "que los médicos que se encontraban fuera" puedan regresar.
"El departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos nos dijo que todo aquel que aplicara al visado CMPP antes del 12 de enero --la fecha en que Obama anuló el programa-- sería procesado", ha explicado, antes de añadir que ya se han concedido desde Washington varios visados.
En este sentido, ha comunicado que el próximo lunes llegarán a Estados Unidos una veintena de médicos sujetos a este programa.
"Es realmente lamentable que este programa sea eliminado", ha indicado Julio César Alfonso, antes de agregar que la ONG continúa trabajando "para el restablecimiento del mismo".
Este programa les otorgaba a los médicos cubanos "un trato preferencial", porque "contradice los esfuerzos" para "combatir las enfermedades que amenazan la salud y la vida" en todo el mundo.
Desde el pasado 12 de enero, el personal sanitario que participa en las misiones médicas enviadas por el Gobierno cubano a otros países y que decida desertar deberá hacerlo en las embajadas y consulados estadounidenses, como el resto de extranjeros.
Este programa específico para médicos cubanos fue creado por el Departamento de Estado en 2006, bajo el Gobierno de George W. Bush, para facilitar los visados a los desertores de dichas misiones internacionales.