Actualizado 10/07/2018 13:51

El embajador de Ecuador en España pide a Correa que "dé la cara" ante la Justicia

Simpatizantes del ex presidente ecuatoriano Rafael Correa
REUTERS / STRINGER . - Archivo

   MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El embajador de Ecuador en España, Cristóbal Roldán, ha pedido este martes al ex presidente Rafael Correa que "dé la cara" ante los tribunales ecuatorianos, que le requieren por el supuesto secuestro del dirigente opositor Fernando Balda, para demostrar que es "un hombre de bien".

   "Le sugeriría que regrese al país, que dé la cara, que se someta a los jueces", ha dicho Roldán en un encuentro informativo celebrado con motivo de su designación como socio honorario de la Asociación de Corresponsales de Prensa Iberoamericana (ACPI) en Madrid.

   El emisario del Gobierno de Lenín Moreno ha asegurado que tendrá un proceso judicial "absolutamente transparente" en el que podrá "dignificar" su figura en caso de ser inocente. "Debe acudir allá para mantener, como creemos, que todavía es un hombre de bien", ha esgrimido.

   Roldán, que formó parte de la Administración Correa, de la que Moreno fue vicepresidente varios años, ha confiado en que el líder izquierdista saldría victorioso. "Yo anhelo pensar que no tiene responsabilidad penal", ha revelado el diplomático latinoamericano.

   No obstante, ha subrayado que en la nación andina los jueces son "absolutamente independientes", por lo que el Gobierno "no puede ni siquiera sugerir" en las decisiones que competen al Poder Judicial. Roldán ha enfatizado que "desde el 24 de mayo de 2017", cuando Correa cedió la vara de mando a Moreno, "volvió a imperar la Justicia en Ecuador".

   Así, interrogado sobre la posibilidad de que Correa se niegue a comparecer ante los tribunales ecuatorianos, ha indicado que su Embajada solo podrá actuar en el caso de que el ex presidente recale en España y las autoridades judiciales ecuatorianas soliciten su extradición.

CASO BALDA

   La Fiscalía le acusó en junio de los delitos de asociación ilícita y secuestro por el supuesto intento de rapto que sufrió Balda en 2012 cuando estaba en Bogotá, una causa que se ha reactivado tras seis años de letargo porque, de acuerdo con la presunta víctima, la anterior administración la bloqueó.

   La jueza del caso, Daniela Camacho, dictó una medida cautelar por la cual a partir del 2 de julio Correa debía presentarse cada quince días en la Corte Nacional de Justicia (CNJ), en Quito, a pesar de que vive en Bélgica, país natal de su mujer, desde que dejó el cargo.

   Llegado el día, Correa se presentó en el Consulado de Ecuador en Bruselas pero el fiscal general, Paúl Pérez, consideró que con ello no cumplió la medida cautelar, que le exigía personarse en la CNJ en Quito, y dictó prisión preventiva, solicitando además a Interpol que emitiera una 'alerta roja' para su detención y extradición.

   La defensa de Correa ha apelado la orden de la Fiscalía, por lo que la decisión vuelve a estar en manos de Camacho. El ex mandatario advirtió en una reciente entrevista con Europa Press de que la "estrategia" era obligarle a volver a Ecuador para que incumpliera la medida cautelar y poder apresarle.

   Correa achaca el caso Balda a la supuesta persecución política orquestada por su sucesor. Moreno llegó al Palacio de Carondelet aupado por su predecesor, pero ahora se declaran rivales por la ofensiva contra la corrupción que ha lanzado el nuevo mandatario y que incluye a Correa y sus fieles.

   "Saquearon nuestro país", ha afirmado este martes Roldán en alusión al Ejecutivo anterior. Correa, por su parte, argumenta que, si la corrupción estaba tan extendida durante su Presidencia, Moreno debía saberlo. "¿Qué es: idiota o cómplice?", planteó en dicha entrevista.