Actualizado 22/03/2018 20:46

El Gobierno y el ELN encargan a la Iglesia y a la ONU evaluar la pasada tregua bilateral

ELN COLOMBIA
REUTERS - Archivo

   BOGOTÁ, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

   El Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) han encargado a la Iglesia Católica y a Naciones Unidas que evalúen la tregua bilateral que estuvo vigente entre el 1 de octubre y el 9 de enero y que dio paso a una ola de atentados que ha amenazado la continuidad del diálogo de paz.

   Las partes han decidido este jueves, al término del último ciclo de conversaciones, convocar a la Conferencia Episcopal Colombiana y a la Misión Especial de la ONU para que a partir del 2 de abril examinen el cumplimiento y el impacto del alto el fuego.

   "Una vez evaluados los informes, se definirán los aspectos políticos y técnicos que permitan dar mandato para el diseño de un nuevo cese al fuego", han explicado el Ejecutivo y la guerrilla a través de un comunicado conjunto.

   Las delegaciones trataron de prorrogar la tregua días antes de que expirara pero el grupo armado insistió en que debían pactarse nuevos términos, lo que propició que se llegara al 9 de enero sin acuerdo. Con el fin del alto el fuego, el ELN retomó los atentados y el presidente, Juan Manuel Santos, suspendió el diálogo de paz.

   Las conversaciones se retomaron la semana pasada con el objetivo prioritario de negociar una nueva tregua bilateral que permita avanzar en el diálogo de paz. En este sentido, las partes han reiterado este jueves "la necesidad de desarrollar la agenda de trabajo con rigurosidad y celeridad".

   Además, han acordado iniciar los debates sobre "la participación de la sociedad en la construcción de la paz". Cada parte presentará una propuesta y se trabajará "en un diseño común", han detallado.

   También han avanzado que "el 5 de abril la plenaria de la mesa de conversaciones recibirá el informe de cada una de las delegaciones con el propósito de dar respuesta a la propuesta Acuerdo Humanitario Ya para el Chocó".

   El diálogo de paz, que comenzó en 2017 en Quito, apenas ha dado resultados más allá de la tregua bilateral. La intención de Santos era sumar al ELN, la segunda guerrilla de Colombia, al acuerdo firmado con las FARC en 2016. El presidente confía en que esta "paz completa" llegue pronto, según ha revelado en los últimos días.