MÉXICO DF, 18 Dic. (Notimérica) -
La organización criminal Guerreros Unidos podría estar detrás del secuestro al diputado en el Congreso de Morelos David Martínez, perteneciente al Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien fue liberado durante la madrugada de este jueves, tras permanecer retenido durante 24 horas, según informó el secretario de Seguridad de Morelos, Alberto Capella.
Su cercanía con el actual gobernador del estado, Graco Ramírez, podría ser el motivo por el que Martínez fue secuestrado. Además, las autoridades han asegurado que los delincuentes planeaban asesinarlo, ya que le amenazaron reiteradamente con matarlo y tampoco se realizó una llamada para reclamar un rescate.
Según informó Capella al periódico local 'Milenio', se han detenido a ocho personas relaciones con este secuestro y podrían producirse otras detenciones de miembros de Guerreros Unidos, una organización criminal a la que también se le ha acusado de participar en la desaparición de los 42 'normalistas' de Ayotzinapa.
"Eres un personaje cercano al gobernador, entonces te vamos a romper la madre", le dijeron los secuestradores a Martínez, quienes le reiteraron que "iba a ser complicado que volviera a ver a su familia".
David Martínez se encuentra en buen estado de salud, pese a que durante su corto cautiverio sufrió tortura psicológica y severos golpes. De hecho, cuando las autoridades localizaron su paradero, lo encontraron atado en una pequeña habitación de una vivienda del municipio de Jiutepec, en el estado de Morelos.
Su liberación ha sido celebrada por el secretario de Seguridad de Morelos, ya que su asesinato hubiese sumido a este estado en una situación de inestabilidad y probablemente hubiese producido un recrudecimiento de la violencia, acabando con las buenas perspectivas en cuanto a seguridad ciudadana que se vislumbraban en los últimos meses en esta zona de la República.
El secuestro de David Martínez se produce escasos días después de que el gobernador del estado, también del PRD, asegurase en una entrevista que cuando llegó al poder dos emisarios del narcotráfico trataron de convencerle de que les dejase actuar en el territorio, a cambio de garantizar la seguridad ciudadana.
También destacó que recibió un 'narcoestado', en el que la infiltración del crimen organizado en los mandos policiales era del 90 por ciento y al menos un presidente municipal tenía claros nexos con este tipo de bandas. Una situación que Graco Ramrez calificó de "terrible", pero se felicitaba por haber sido capaz de reducir las cifras de violencia que se dan en la zona.
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