Actualizado 21/09/2016 14:46

La incertidumbre política en Venezuela tiene fecha límite

La incertidumbre política en Venezuela tiene fecha límite
Reuters

    CARACAS, 21 Sep. (Notimérica) -

   El 10 de enero de 2017 marca el inicio de los dos últimos años del mandato del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, fecha a la que la oposición no quiere llegar sin haber celebrado antes el referendo revocatorio contra el mandatario, ya que en ese caso el partido del Gobierno se mantendría en el poder.

   La oposición, reunida en la coalición de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) culpa a Nicolás Maduro de la actual crisis económica por la que atraviesa el país con alta inflación y desabastecimiento de alimentos y productos básicos.

   El rumbo político de Venezuela se decidirá en función de lo que decida la Comisión Nacional Electoral (CNE) acerca de cómo y cuándo se deben recopilar las huellas dactilares de al menos un 20 por ciento del censo electoral --requisito para que pueda llevarse a cabo el referendo revocatorio contra Maduro--.

    Dicha recopilación se traduce en unos cuatro millones de personas a favor del revocatorio contra Maduro, que en el caso de que se consigan, el CNE deberá validarlas en un plazo de 15 días.

   Lo que reclama la oposición es que el revocatorio se celebre antes del 10 de enero, fecha que marca el inicio de los últimos dos años del mandato de Nicolás Maduro, ya que tal y como establece la Constitución venezolana, si se celebra después de dicha fecha, el vicepresidente de Venezuela, Aristóbulo Istúriz, deberá hacerse cargo del Gobierno hasta el final de la legislatura en 2019, situación en la que el partido del Gobierno seguiría en el poder.

   Por otro lado, en el caso de que el referendo se celebrara antes de dicha fecha y Maduro lo perdiera, se convocarían nuevas elecciones, en las que el chavismo --vigente en el país desde 1999-- podría caer. Para ello, la oposición necesitaría unos 7,6 millones de votos --más votos que con los que Maduro fue elegido presidente en abril de 2013--.

   Sin embargo, Nicolás Maduro ya ha expresado en varias ocasiones que no habrá revocatorio en 2016 y que "si no cumplen los requisitos, el referendo será el próximo año y punto", además de incluso abrir la posibilidad de que no se celebre ninguna consulta.

   En unas declaraciones, el diputado a la Asamblea Nacional y expresidente del Parlamento venezolano, Diosdado Cabello, aseguró que si Nicolás Maduro es sacado de la presidencia de la república vía referéndum revocatorio, según las normas constitucionales, su sucesor lo podría nombrar vicepresidente para luego renunciar y devolverlo a su antiguo cargo como jefe de Estado.

   Sin embargo, el abogado constitucionalista Gustavo Sosa Izaguirre corrigió esas declaraciones explicando que "esa pretensión de la que habla el diputado Cabello violaría los principios fundamentales de la Constitución y el espíritu del poder constituyente", según 'El Venezolano News'.

   Ante esta situación, durante los últimos meses la oposición ha presionado con sucesivas protestas en la calle para que se lleve a cabo el revocatorio. La última protesta se produjo el 1 de septiembre, en la que decenas de miles de personas reclamaron el tan buscado referendo.

   En cuanto a otros sectores, algunos apoyan el revocatorio en 2017 como la única vía para poder iniciar un cambio en el Gobierno, aunque tampoco se muestren totalmente a favor.

   Este es el caso de la fundadora y diputada del movimiento político Vente Venezuela, María Corina Machado, que ha explicado que si se pospone el revocatorio para enero "esto produciría una agonía a una Venezuela que se muere de hambre, sería sacar al dictador pero dejar la dictadura y resolverle un problema al partido oficialista".

   "Además, estaríamos dejando abierta la posibilidad de que un militar presidiera la República y traicionaríamos a los propios venezolanos", agregó, según 'El Nacional'.