BRASILIA, 16 Ene. (Notimérica) -
El ministro de Justicia y Ciudadanía de Brasil, Alexandre de Moraes, lamentó este domingo las muertes producidas en el motín del Penal Federal de Alcaçuz, la prisión más grande del estado brasileño de Río Grande del Norte.
A través de un comunicado, De Moraes agradeció, "en nombre del presidente, Michel Temer, el trabajo de las fuerzas policiales que actuaron en defensa de la sociedad, evitando fugas y controlando la situación".
Asimismo, el Ministerio de Justicia informó de que el gobernador de Río Grande del Norte, Robson Faria, entró en contacto con el responsable de la cartera de Justicia y le comunicó el fin del motín, que por el momento se habría saldado con la vida de 26 personas --la mayoría decapitadas--, según el director del Instituto Técnico de Peritaje (ITEP), Marcos Brandao.
Tras la tragedia, De Moraes confirmó que, a pedido del gobernador del estado Río Grande del Norte, se autorizó que "parte de los 13 millones de reales (cuatro millones de dólares) del Fondo Penitenciario Nacional (Funpen, por sus siglas en portugués), destinados a la modernización y adquisición de equipamiento, serán utilizados en construcciones que refuercen la seguridad del penal de Natal".
La prisión de Alcaçuz, ubicada a 25 kilómetros de Natal, cuenta con más de 1.000 presos pese a tener capacidad para solo 620, de acuerdo con los datos de Justicia.
En las últimas semanas se han producido motines con muertos en prisiones brasileñas, el más grave el ocurrido a principios de año en una prisión de Manaos en el que murieron 54 presos y se fugaron un centenar de reclusos.