Actualizado 12/04/2017 08:29

El gerente de Tabacalera del Este y 'mano derecha' de Cartes denuncia al líder del PLRA por difamación

Efrain Alegre, presidente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA)
JORGE ADORNO / REUTERS

MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -

José Ortiz, el gerente de Tabacalera del Este y 'mano derecha' del presidente de Paraguay, Horacio Cartes, ha presentado este martes una querella por difamación, calumnias e injurias contra el presidente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), Efraín Alegre Sasiain, quien la semana pasada le acusó de ser quien ordenó el asalto a la sede de su formación la semana pasada que acabó con centenares de heridos y detenidos.

Ortiz ya anunció el pasado jueves que había dado "instrucciones inmediatas" a sus abogados para "iniciar la acciones legales correspondientes a fin de que el señor Efraín Alegre responda ante la Justicia".

Este martes, uno de sus abogados, José Domingo Almado, ha presentado efectivamente una querella por difamación, calumnias e injurias, según ha recogido el diario paraguayo 'Hoy'.

En declaraciones a la emisora 1020AM, Almada ha advertido, además, de que el presidente del PLRA tendrá que demostrar que fue Ortiz quien ordenó el asalto a la sede del partido, que acabó con la muerte del líder del ala juvenil de la formación, Rodrigo Quintana.

El abogado ha calificado de "falso y temerario" el testimonio de Alegre que apunta a su cliente, y ha señalado que sus declaraciones afectan al "honor y reputación" del empresario.

"Él no dispuso ninguna orden para ingresar (en la sede del partido), porque él no puede disponer (esa orden). Y jamás estuvo en comunicación con (Tomás) Paredes Palma", ha agregado, en referencia al único oficial de Policía imputado por este caso.

"Alegre mintió. Asusta que un candidato a presidente de la República que quiera guiar el destino del país mienta con tanta ligereza y con tanta irresponsabilidad", ha lamentado el abogado.

La semana pasada, el líder del PLRA aseguró tener pruebas que señalan a Ortiz como responsable de dar la orden de la actuación policial que acabó con la muerte de Quintana y acusó al empresario de ser quien "tiene el control del Ministerio del Interior y toma las decisiones operativas".

Durante el primer fin de semana de abril, después de las protestas, el presidente destituyó al ministro del Interior, Tadeo Rojas, y al comandante de la Policía, Críspulo Sotelo --próximo a Ortiz--, tras la muerte del dirigente juvenil opositor.

La Policía de Paraguay negó en su momento toda responsabilidad en el asesinato de un Quintana, que tuvo lugar durante el asalto en Asunción, la capital del país, inmerso en una grave crisis política por una polémica votación que abre el camino a la reelección del presidente.