Actualizado 19/12/2014 21:58

Rousseff considera a Barbosa y Mercadante para puesto director Petrobras

Presidenta de Brasil, Dilma Rousseff en el Planalto Palace
Foto: UESLEI MARCELINO / REUTERS

BRASILIA, 19 Dic. (Reuters/Notimérica) -

   La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, está considerando a su jefe de gabinete Aloizio Mercadante y al futuro ministro de Planificación Nelson Barbosa para asumir como director de la junta directiva de la petrolera estatal Petrobras, según informó el viernes una fuente con conocimiento de la situación.

   Rousseff, quien el jueves se comprometió a fortalecer la gobernanza corporativa de Petrobras, necesita nombrar a un nuevo director para reemplazar al saliente ministro de Finanzas Guido Mantega, sostuvo la fuente, que pidió anonimato ya que no puede hablar oficialmente porque el tema está en discusión.

   Barbosa está visto como el candidato para quedarse con la posición debido a que su nombramiento sería una manera de equilibrar el poder entre los ministerios de Planeamiento y Finanzas, dijo la fuente.

   Pero Mercadante ha sido el aliado más cercano de Rousseff en los últimos meses, un hecho que lo podría catapultar al puesto, destacó la fuente.

   El nombramiento del nuevo director de Petrobras se da en momentos en que la empresa está inmersa en el peor escándalo de corrupción de su historia.

   En los últimos años, el director de Petrobras, controlada por el Gobierno federal de Brasil, ha manejado la estrategia a largo plazo de la empresa y la ha alineado con las prioridades de desarrollo gubernamentales.

   Rousseff fue directora de Petrobras entre 2003 y 2010, cuando se habrían producido buena parte de los delitos en el supuesto sistema de sobornos que imperaba en la compañía.

   La mandataria ha dicho en repetidas oportunidades que no tenía información de esta situación y ha prometido llegar al fondo del escándalo.

   Fiscales brasileños aducen que ejecutivos de Petrobras conspiraron para inflar los precios de refinerías, barcos, anuncios publicitarios y otros bienes y servicios.

   También dicen que luego contratistas devolvieron un porcentaje de los contratos inflados a ejecutivos y miembros de la coalición gobernante de Rousseff en forma de sobornos y contribuciones para campañas electorales.