Actualizado 18/04/2016 09:08

La semana laboral de cuatro días en Venezuela es "bochornosa"

Venezuela escasez
REUTERS

CARACAS, 17 Abr. (Notimex/Notimérica) -

   El dirigente político de la oposición venezolana Antonio Sotillo Luna ha calificado de bochornoso el decreto presidencial que declara los viernes como no laborables para la administración pública nacional, en función del ahorro energético, dejando una semana laboral de tan solo cuatro días.

   "La medida en nada contribuirá a solucionar la escasez de agua en el país, pues se trata de un simple paliativo frente a la difícil situación que estamos viviendo", precisó el dirigente nacional del Partido Socialcristiano Copei.

   El exgobernador del Estado de Lara dijo que el gobierno fue negligente por no construir embalses de agua de reserva para épocas de sequía, ni nuevas subestaciones de generación eléctrica y ahora pretende echarle toda la culpa al fenómeno de 'El Niño'.

   "Con esta reducción de la semana laboral a solo cuatro días, el país que en estos momentos requiere el aporte de todos los venezolanos para superar la grave crisis económica terminará de hundirse, pero eso parece importarle poco al presidente Nicolás Maduro", resaltó.

   Dijo que con estos "viernes de farra", el despilfarro de energía será mayor, ya que toda esta legión de empleados públicos permanecerán ahora más tiempo en sus casas, abriendo y cerrando neveras, así como utilizando sus computadoras y otros equipos electrónicos.

   Destacó que la Cota de la Central Hidroeléctrica de Guri, proveedora del 63 por ciento de la energía eléctrica del país, está en 243, el mínimo de toda su historia, por no haberse construido los embalses necesarios para una población en constante crecimiento.

   Indicó que el gobierno, cuando tuvo recursos a manos llenas, pudo haber hecho las inversiones que la industria eléctrica requería para generar más megavatios. Sin embargo su prioridad fue dotar de generadores de electricidad a Nicaragua, Bolivia, Haití y Cuba.

   Resaltó que ahora el gobierno exige a los centros comerciales y hoteles autogenerar por lo menos 20 por ciento de su consumo, mediante la adquisición de plantas portátiles que utilizan como combustible fuel oil, que no se consiguen en el país.

   "Por cierto a Cuba se le compraron muchas de estas plantas y nadie sabe dónde fueron a parar, así mismo este país vendió a Venezuela millones de bombillos ahorradores para sustituir a los incandescentes, pero aun así no se logró disminuir el consumo eléctrico", comentó el dirigente copeyano.

   Sotillo Luna expresó que en fuentes oficiales se comenta que el gobierno estudia fórmulas para evitar los "racionamientos dolorosos", uno de los cuales sería el ajuste en las tarifas, lo que significa un nuevo aumento, por un servicio que en Venezuela se presta en forma irregular.