LAS VEGAS (ESTADOS UNIDOS), 17 Nov. (Notimérica) -
"El mundo se pasa media vida construyendo muros y otra media vida intentando tirar los muros", esas fueron las palabras que Alejandro Sanz dedicó a los invitados de los Grammy Latinos en la actuación que compartió con los 'dreamers', los jovenes inmigrantes indocumentados de Estados Unidos que luchan por conseguir un futuro mejor.
El cantante español recibió el premio Persona del Año por su exitosa trayectoria a nivel mundial y salió en defensa de los jóvenes soñadores sin papeles de Estados Unidos, un colectivo de personas que vive desde hace muchos años en el país y aún así todavía se encuentra en situación ilegal. Además, el artista aseguró que cuando uno es padre lo es de todos los niños del mundo y los 'dreamers' también son sus niños.
Tras recibir el premio de manos de Juan Luis Guerra a Persona del Año interpretó algunos de sus temas más conocidos como 'Cuando nadie me ve', 'No es lo mismo' y 'Corazón partío'. El español comenzó su actuación en solitario y la finalizó acompañado por un grupo de 'dreamers' que lucían camisetas negras con un lema que decía "tenemos un sueño".
Después de la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos se suspendieron los programas que existían y amparaban a los jóvenes inmigrantes indocumentados, por eso, tras esta suspensión, una gran parte de ellos podrían ser deportados. El cantante se mostró comprometido con la causa en su actuación pero también lo hizo más tarde con los medios de comunicación a quienes aseguró que le parecía algo increíble que esto pudiese estar pasando en este siglo y que faltaba una gran sensibilidad hacia las personas.