BUENOS AIRES, 11 Abr. (Notimérica) -
La joven activista argentina del movimiento 'Ni Una Menos', Micaela García, fue hallada muerta a los 21 años este sábado en los aledaños de la localidad de Gualeguay (situada a más de 230 kilómetros de la capital), tras pasar una semana desaparecida.
La joven "era una chica responsable y segura, no le tenía miedo a nada", ha afirmado quien fue su entrenador de gimnasia aeróbica, Jorge Fillon. La argentina era una gran atleta, que, tras mucho esfuerzo y horas de entrenamiento, logró clasificarse en cuarto lugar para el Campeonato Mundial de Gimnasia Artística en Alemania.
Tras el Mundial, García participó en otras competiciones nacionales e internacionales como los Juegos Panamericanos de Camboriú de 2010 en la categoría Grupo y logrando la medalla de plata.
Pero a los 15 años decidió apartarse de la gimnasia e introducirse en otros deportes, algo que no supuso alejarse de su profesor Fillon con quien tuvo mucho contacto.
ACTIVISMO
La joven dejó de entrenar a los 16 años y, consecuentemente, también de viajar. Empezó su carrera en Gualeguay, y cada viernes volvía a Concepción, donde militaba en el barrio Villa Mandarina con su grupo 'Movimiento Evita'.
"La negra", como la apodaban sus amigos, tenía previsto volver a vivir en Concepción para militar "de lleno". "Los chicos con los que ella trabajó en el frente barrial tenían entre 11 y 12 años. Hoy tienen 15 y 16 y están terminando secundaria. Hacen deporte y eso es gracias a ella, que organizaba torneos de fútbol y batucadas", ha comentado su amigo de militancia Damián Castro a 'La Nación'.
La misma noche de la desaparición de García, su amigo Castro había hablado con ella sobre las acciones sociales de ese fin de semana. "Con Micaela hablábamos hasta el cansancio de que la solución no es la mano dura, no es endurecer las penas", ha explicado Castro.
El pasado 1 de abril, a la salida de esa fiesta en el boliche King, en Gualeguay, las cámaras de seguridad de la zona registraron que a García la había seguido un coche cuyo propietario era Sebastián Wagner, un hombre de 30 años que al día siguiente huyó de la ciudad.
La autopsia ha revelado que la chica murió asfixiada y, por su parte, la investigación judical ha apuntado como principal sospechoso a Wagner, quien ya había sido condenado en 2012 por dos violaciones, pero que se encontraba en libertad condicional desde hace menos de un año. Un hecho que ha generado críticas incluso por parte del presidente de Argentina Mauricio Macri quien sugirió el pasado domingo que debería ser separado de su cargo Carlos Rossi, el juez que dejó en libertad al principal sospechoso del asesinato.
"No se trata sólo de que Wagner cumpla una condena de 20 años o que el juez Rossi sea destituido. Eso no va a hacer que Micaela vuelva ni que deje de haber muchas más como ella. Para que esto sirva, para que ella descanse, tenemos que cambiar nosotros", ha apuntado Castro.
Ha sido tal la conmoción que ha suscitado este asesinato, que incluso el Papa Francisco contactó con la familia vía telefónica para expresarle sus condolencias. Pero también en redes sociales se ha producido un boom de mensajes, sobre todo, porque la joven participaba en la militancia política y en movilizaciones de 'Ni Una Menos'.