BUENOS AIRES, 20 May. (Notimérica)
Parece una broma, pero no lo es. Una juez de Puerto Madryn, Argentina, concedió un insólito pedido a un preso argentino por homicidio. El hombre, encarcelado por tener vínculo con el narcotráfico y por homicidio agravado, pidió ejecutar un programa para adelgazar consistente en salir de prisión una vez a la semana para realizar actividad física, y la juez accedió a este pedido.
La letrada que habilitó al preso, identificado como Matías Arévalo, de 27 años, fue Patricia Asaro. El hombre está encarcelado por "homicidio agravado con uso de arma de fuego" (asesinó el pasado año a Gustavo Machao de un disparo en el pecho) y señalado como sicario del narcotráfico, informa 'El nueve'.
El hombre se trasladará de la cárcel de Puerto Madryn hasta la ciudad de Trelew, ubicada a 65 kilómetros del lugar para poder "bajar de peso y tonificar sus músculos".
Durante la realización de los ejercicios, el preso estará vigilado por varios agentes. Y, aunque la fiscalía se opuso desde un primer momento al beneficio porque existe riesgo de fuga --Arévalo ya estuvo cuatro meses prófugo--, finalmente la juez accedió a la petición del reo ya que este sufre "complicaciones cardiovasculares y metabólicas".
"No se trata en el caso de una actividad lúdica lo que se pretende, sino que se enmarca en estrictas razones médicas vinculadas a su salud, que es deber estatal preservar", manifestó la defensa pública en el informe que presentó ante las autoridades judiciales.