BUENOS AIRES, 29 May. (Notimérica) -
Por la calle principal de La Cumbrecita, el único pueblo peatonal de Argentina, se vislumbra un cartel de bienvenida: "Estimado visitante, nos permitimos recordarle que nuestra localidad ha sido declarada zona de protección ambiental. Por este motivo dentro del pueblo no está permitido acampar, prender fuego, cazar animales o aves, practicar equitación, tirar residuos fuera de los cestos, pescar en épocas de veda ni cortar cualquier tipo de planta".
La Cumbrecita es un pequeño pueblo ubicado a 1.450 metros del nivel del mar en las montañas de la provincia argentina de Córdoba. Sus apenas 1.000 habitantes pueden presumir de vivir en un enclave inédito que se autoabastece de energías renovables. Su principal actividad económica está basada en los miles de turistas que visitan el pueblo al año.
En 1934 el ingeniero alemán afincado en Buenos Aires Helmut Cabjolsky, compró 500 hectáreas en estas sierras cordobesas con la finalidad de tener un lugar al que alejarse del caos y estrés de la ciudad.
Cuando compró el terreno, el suelo era de arena y roca pero el alemán decidió reforestar la zona y finalmente, en 1938 trazó las calles peatonales. Pero no fue hasta la Segunda Guerra Mundial cuando ciudadanos europeos exiliados procedentes de Alemania, Suiza, Francia y Austria fundaron La Cumbrecita.
"No entiendo cómo en los centros históricos de las capitales de Europa aún se permiten coches. Cuando entras al centro de cualquier ciudad está colapsada, tanto por la cantidad de turismos como por la contaminación visual, ambiental y sonora", explica la nieta del fundador del pueblo Ingrid Cabjolsky al periódico 'BBC'.
Desde 1996, trabajadores, residentes y vendedores de bienes de consumo tienen permitido entrar en coche al pueblo sólo temprano por las mañanas y tarde por las noches.
La peatonalización es una medida que están intentado aplicar en zonas concretas de ciudades como París, para reducir la polución y facilitar zonas a los peatones, también en Purmamarca, un pequeño pueblo de la provincia argentina Jujuy y en San Pedro de Atacama (Chile).
Los habitantes de La Cumbrecita tienen integrada la sostenibilidad ambiental en su estilo de vida. Una planta de residuos a pocos kilómetros del pueblo garantiza el reciclaje de plásticos, vidrios y metales. Los residuos orgánicos son aprovechados en los jardines de las casas. Además, la comunidad cuenta con una planta de tratamiento cloacal, sistemas para recoger agua en pozos y en el Río Almbach.
(((FOTO la cumbrecita)
Parece un pueblo de ensueño en el que cualquiera quiere vivir una temporada lejos de la agobiante ciudad. Sin embargo, no es sencillo poder adquirir una casa allí ya que al ser parte de una reserva natural la ley de edificación es muy estricta. Como mínimo se tienen que comprar 2.000 metros cuadrados.
