Actualizado 24/07/2015 19:21

Dos adolescentes matan a sus padres y a tres de sus hermanos en Oklahoma

   NUEVA YORK, 24 Jul. (Notimérica) -

   La Policía de Broken Arrow (Oklahoma) ha informado de la detención de dos adolescentes, como presuntos autores de la muerte sus padres y tres de sus hermanos menores de edad, en lo que se considera ya una "tragedia sin precedentes" en la tranquila localidad del centro-sur de los Estados Unidos.

   El sargento de Policía de Broken Arrow, Thormar Cooper, ha señalado en un comunicado que en la escena del crimen fueron hallados los cuerpos de dos adultos y tres menores con varias puñaladas, además de una sexta víctima de 13 años, gravemente herida que fue inmediatamente trasladada al hospital regional, y una niña de 2 años de edad que resultó ilesa.

   Robert Bever, de 18 años, y su hermano de 16 utilizaron supuestamente un hacha de guerra como principal arma para perpetrar los asesinatos de sus padres --David Bever, de 52 años, y su esposa Abril, de 44--, y sus tres hermanos de 12, 7 y 5 años de edad.

LA SONRISA DE UNO DE LOS PRESUNTOS ASESINOS.

   Las autoridades han indicado, según recogen medios locales, que en menos de 24 horas de investigación están desconcertados por la sonrisa de Robert Bever.

    "Es complicado para una persona racional comprender que alguien pueda hacer algo tan horrible y no tener ningún remordimiento", ha declarado el policía Leon Calhoun en el diario 'Tulsa World'.

   Las víctimas fueron descubiertas alrededor de las 23:30 del miércoles, hora local (04:30 GMT), en el interior de una residencia de dos pisos en Magnolia Court, tras un aviso de emergencia al 911 en una llamada sin que nadie contestara. Los agentes se trasladaron al lugar de los hechos para realizar un "chequeo rutinario e investigar un problema desconocido".

   La policía rastreó el número y consideran que la llamada pudo ser realizada por la niña de 13 años de edad, según ha confirmado el sargento Thomas Cooper. Los jóvenes, supuestos autores del quíntuple crimen, lograron esconderse en el bosque cercano a la vivienda al ver a las autoridades, aunque fueron detenidos minutos después gracias a los perros que utiliza el Cuerpo de Policía.

LOS NIÑOS NO JUGABAN CON OTROS DEL VECINDARIO.

   La familia estaba integrada por nueve miembros: la pareja y siete hijos, cuatro de ellos varones y tres chicas. El padre solía trabajar desde el hogar y los hijos estaban escolarizados en casa, no permitiéndoles jugar con los niños del vecindario, según han explicado los vecinos de las víctimas.

   Recientemente, la familia acababa de fundar una organización no lucrativa en pro de los bebés prematuros, ya que su hija de 2 años de edad, la única que no fue agredida, nació prematuramente.

   La policía desconoce los motivos por los cuales los hermanos y presuntos asesinos, de 18 y 16 años de edad, perpetraron el ataque contra su propia familia. Por el momento, los investigadores continúan procesando la escena del crimen.

   Broken Arrow es un suburbio localizado al sureste de la ciudad estadounidense de Tulsa, la segunda más poblada del estado de Oklahoma, en el que viven familias de clase media y alta.