Actualizado 30/03/2015 17:05

Los drones, una fuerte apuesta en seguridad en Colombia

Drones
Foto: REUTERS

BOGOTÁ, 30 Mar. (Colprensa/Notimérica) -

   Desde su reciente aparición, los drones están cambiando al mundo por la variedad de labores que pueden realizar. Han evolucionado de ser juguetes a captar imágenes imposibles, entrar en domicilios y, por primera vez en Colombia, hacer patrullajes aéreos, una novedad que se estrenará durante los días festivos de de Semana Santa.

   La Policía Nacional hizo este anuncio el pasado miércoles en la presentación del plan 'Semana Santa Segura', en el que utilizarán 25 de estas aeronaves no tripuladas, cada una de las cuales puede mantenerse hasta 24 horas en el aire, para tener un control permanente de las calles y de las multitudes durante estos días.

   Aunque el revuelo actual corresponde al uso que se dará a estos aparatos durante esta semana, los drones son una realidad que se quedará indefinidamente en el país, y que hace parte sustancial de las nuevas estrategias de la Policía para realizar controles de seguridad, apoyar el desarrollo rural y mejorar condiciones en un eventual escenario de posconflicto.

TODOS LOS DRONES DE LA POLICÍA

   El cuerpo de seguridad suma 35 aeronaves de este tipo, de diferentes formas, tamaños y capacidades. Los más versátiles son los llamados de 'ala fija' y 'ala rotatoria', que funcionan como un avión o un helicóptero, respectivamente.

   Los primeros tienen una capacidad de recorrer distancias superiores, mientras que la función principal de los de ala rotatoria es mantenerse fijos en diferentes puntos por tiempos más prolongados.

   El jefe de la oficina de Telemática de la Policía, el coronel Jairo Gordillo, aseguró que una de las principales razones para darle protagonismo a estas herramientas es el hecho de que son elementos altamente disuasivos del crimen ya que "las personas cuando se sientes vigiladas u observadas, tienden a actuar diferente, manteniendo, de alguna forma, las buenas maneras".

   Afirmó, además, que son útiles ya que permiten un registro de personas, sobre todo en espacios donde se concentran multitudes, como partidos de fútbol, conciertos, marchas o, en este caso, procesiones, lo que facilita la identificación de rostros de sospechosos, en caso de que se presenten eventualidades delictivas.

   "La idea es que no suceda nada, pero con los drones, de presentarse alguna eventualidad, la capacidad de tener un registro permanente facilita que se identifiquen a las personas que se encontraban alrededor de los hechos o se pueda observar en vídeo al culpable de algún delito", agregó el jefe de la oficina de Telemática.

   En vista de que, además de su importancia, los costes de estos aparatos son accesibles (pueden conseguirse, para uso de vigilancia, desde los 2.000 dólares), la Policía ha decidido darles mayor importancia y optimizar su uso.

¿CÓMO SE UTILIZAN?

   De acuerdo con el coronel Gordillo, lo realmente útil es poder agregarle al dron tecnología punta: cámaras infrarrojas, cámaras térmicas, sensores y sistemas montados en la aeronave que permiten la recolección y transmisión de imágenes en tiempo real a diferentes destinos.

   En vista del rotundo sí dado a la permanencia de estos robots y los aparatos que pueden transportar, la Policía creó diferentes estrategias para sacarle el mayor provecho posible a este avance.

   Así, estas aeronaves no tripuladas o remotamente tripuladas asumirán diferentes funciones, dependiendo del espacio en que se movilicen, urbano o rural:

   1. En espacios urbanos

   - Control de multitudes: tener una visualización desde un plano superior da muchas ventajas, desde la distribución de las personas en el espacio, hasta la producción de un efecto disuasivo en las personas.

   - Desastres naturales: la facilidad de transporte y despliegue permite la obtención de diferentes perspectivas del desastre, adentrarse en los lugares a los que un carro o un helicóptero no pueden llegar, sin poner en riesgo al equipo humano.

   - En actividades de búsqueda y rescate: son especiales para las zonas complejas por la oscuridad u otras condiciones, pues gracias a las cámaras térmicas pueden ubicar personas y, a través de las coordenadas que siempre emiten, determinar a dónde debe ir un cuerpo de rescate con la mayor brevedad posible.

   2. En zonas rurales

   - Control de carreteras: se pueden tener patrullas en un puesto fijo y tener drones sobrevolando y avisando dónde se paró un coche, dónde hubo un accidente, permitiendo así la inmediatez de la atención.

   - Control de fronteras: una aeronave controlando un espacio como este, donde hay contrabando y tráfico de personas, da más posibilidades de control.

   - Minería ilegal: es una herramienta para los grupos de carabineros porque les permite tener una visualización amplia y permanente de las zonas en las que se realiza este tipo de acciones, además de identificar con las cámaras a los responsables.

   - Espectrofotometría: permiten analizar suelos, a partir del color y del espectro que generan, para ayudar a los campesinos a optimizar sus tierras y cultivos.

   Todo esto, señala el coronel Gordillo, apoyaría mucho un escenario de posconflicto porque la idea de volver al campo y hacerlo más seguro y más productivo empezaría a ser una realidad.

REGLAMENTACIÓN

   Todavía existen muchas personas que piensan en estos aparatos como en un juguete costoso, en el que existen límites para su uso debido al peligro que pueden representar al caer sobre alguna persona o algún vehículo, al invadir el espacio aéreo de naves con pasajeros o por violar los derechos de intimidad.

   Antes de aplicar todos los usos programados, la Policía está en la etapa de capacitar a miembros de la institución en el manejo de drones, tanto en temas de límites legales, como en condiciones técnicas: aprender a despegar, a aterrizarlos y a controlar los contratiempos que se puedan presentar durante el vuelo.

   La Aeronáutica Civil no ha expedido una reglamentación oficial, pero ya tiene recomendaciones sobre el uso de drones, como la condición de que no podrán volar aeromodelos de particulares sobre áreas edificadas o directamente sobre público o aglomeraciones de personas.