CIUDAD DE MÉXICO, 14 Jun. (Notimérica) -
Valeria Teresa Gutiérrez Ortiz, niña de 11 años, salió del colegio este jueves y su padre Sergio Gutiérrez, fue a recogerla en bicicleta. Cuando se dirigían hacia su casa, ya que los padres están divorciados, empezó a llover y Gutiérrez le indicó a su hija que cogiese el autobús para llegar a casa y así evitar mojarse. Gutiérrez esperaba ver a su hija en la parada cercana a su casa pero nunca más volvió a verla.
La niña tomó el bus de la Ruta 40, en el número 278 de la calle Mañanitas ubicada en la ciudad del Estado de México, Nezahualcóyolt. Los padres rápidamente reportaron la desaparición y junto a familiares estuvieron buscando a la pequeña toda la noche.
Este viernes se hizo pública la desaparición a las 10.00 (hora local) pero no fue hasta las 13.00h cuando los vecinos de la calle Zandunga 158, indicaron que desde la noche del jueves alguien había abandonado un autobús. La policía encontró en su interior el cuerpo de la niña vestida con el uniforme de la escuela. Los forenses determinaron que la niña fue violada y asesinada.
Recientemente se ha publicado un vídeo de una cámara de seguridad que muestra como la pequeña subió al autobús.
El presunto asesino, quien ya ha sido detenido, ha sido identificado como José Octavio Sánchez Razo, un hombre de 24 años que era el dueño del autobús en el que se perpetró el feminicidio. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México ha indicado que Sánchez Razo tenía antecedentes penales en la Ciudad de México.
Este fin de semana tanto los familiares como los vecinos de la zona han salido las calles a reclamar más seguridad ante la cantidad de mujeres asesinadas en el país así como para denunciar la falta de atención que recibió la familia por parte de las autoridades desde el momento en que denunció la desaparición.
Tras la desaparición, los padres acudieron a denunciar los hechos no obstante, las autoridades le expresaron que estaban muy ocupados debido a la cobertura de las elecciones del Estado de México y que debían acudir al Centro de Atención a Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA). Al día siguiente las autoridades se pusieron a buscar a la pequeña.
La madre de la víctima, Jaqueline Ortiz, ha manifestado a través de las redes sociales que si las autoridades hubiesen iniciado la búsqueda desde el primer momento en que denunciaron cabría la posibilidad de haber encontrado a la niña con vida.
Según los familiares más cercanos, la pérdida de la pequeña no tiene solución por ello ahora sólo queda luchar para que los feminicidios de mujeres y niñas cesen.