Actualizado 01/12/2015 11:24

Hipopótamos de la antigua finca de Pablo Escobar siguen dando problemas

Hipopótamos de la antigua finca Nápoles de Pablo Escobar
COLPRENSA

   BOGOTÁ, 1 Dic. (Notimérica) -

   La 'herencia' del narcotraficante más conocido y temido de todos los tiempos, Pablo Escobar, sigue dando quebraderos de cabeza transcurridos 22 años de su muerte.

   Y es que los animales descendientes del grupo importado en los años 80 por el capo colombiano, siguen dando problemas a los habitantes de la localidad de Puerto Triunfo en la provincia de Antioquia, donde el famoso narco tenía su lujosa propiedad rural, la Hacienda Nápoles, reconvertida en parque temático.

Varios han sido los incidentes ocurridos con los animales descendientes de los que importara Escobar desde África, entre ellos, hipopótamos que escaparon de la Hacienda Nápoles, situada a unos 165 kilómetros de Medellín, y que encontraron en zonas rurales del corregimiento Doradal pequeños lagos, hábitats ideales para vivir y reproducirse sin control.

   "Los hipopótamos están en estado silvestre, es decir, estos animales fueron abandonados por estupefacientes hace 30 años en esta zona. Ellos se apoderaron de un lago que hay contiguo al Parque Temático. Están ahí porque instintivamente reconocen esa zona como su territorio, lo defienden y lo cuidan, pero si ellos supieran que tienen el Magdalena Medio a su disposición ya se hubieran ido todos. Acá hay un sitio que les garantiza alimentación, tranquilidad y hábitat, y ellos lo cuidan y no se van a mover", ha explicado el biólogo David Echeverry.

   

   RECAPTURA DE 4 HIPOPÓTAMOS.

   Ahora, cuatro de ellos están dando problemas a los moradores del Magdalena Medio, si bien no se han registrado accidentes con las poblaciones cercanas, informa El Colombiano.

   Para atajar el problema, la Corporación Autónoma Regional Rionegro-Nare, Cornare, ha ideado una estrategia para ubicar y recapturar a los animales que andan sueltos en las inmediaciones del corregimiento de Doradal, en Puerto Triunfo.

   La educación en prevención sobre esta especie y los operativos realizados por especialistas en el tema son algunas de las estrategias desplegadas por Cornare para dar con estos mamíferos gigantes que amenazan a la comunidad. Desde hace varias semanas se contrató el servicio de una organización ambiental para ubicarlos y poderlos neutralizar.

   Con un rifle importado de los Estados Unidos, cuyo costo ha superado los 7.000 dólares, y personal especializado se trabaja en la ubicación de las especies que andan sueltas en lagos cercanos a las poblaciones.

   

   De acuerdo con David Echeverry, biólogo de Cornare, el trabajo ha contado con la cooperación de técnicos especialistas y la misma ciudadanía que ha identificado los lugares en los que se mueven los mamíferos.

   Gracias a este trabajo mancomunado se señaló que en un lago que hay en las proximidades a la Aldea Doradal habitan continuamente dos de los animales; sin embargo, en el día su avistamiento ha sido difícil porque se internan en pastizales y pantanales de gran tamaño que no permiten ubicarlos.

   Así mismo, con el monitoreo realizado en la zona, se descubrió que los otros dos hipopótamos se mueven por caños, pero su punto de influencia es dinámico.

   Hasta ahora no se ha determinado un espacio exacto para ser puestos una vez se logre la captura, aunque las autoridades manejan varias opciones como un albergue temporal donde no representen un peligro para las personas. De igual forma, se plantea que se dé una reubicación fuera del país.

   MEDICAMENTO.

   "Estamos a la espera de que la Policía nos ayude con la gestión de un medicamento que es mucho más óptimo para el proceso de recaptura. Ese medicamento se llama etorfina, pero es restringido y su consecución solo se puede a través de las autoridades", señaló Echeverry.

   "Estamos tratando de optimizar recursos porque el alquiler del rifle, el personal y el transporte de todo esto ronda en 25 millones de pesos", añadió el biólogo, quien dijo que si las tareas rinden frutos positivos se espera que en menos de dos meses se hayan ubicado y recapturados los animales.

   

   Aunque no se han presentado accidentes con las poblaciones cercanas, Cornare ha realizado campañas de prevención y concientización con la comunidad y establecimientos educativos para que estén alerta ante la presencia de uno de los animales. Aunque para los niños es curioso ver una especie de estas, las autoridades dicen que puede tornarse peligroso.