CIUDAD DE GUATEMALA, 16 Mar. (Reuters/Notimérica) -
A una semana del incendio que acabó con la vida de al menos 40 adolescentes en un centro de protección de menores de Guatemala, las autoridades continúan investigado quién decidió encerrarlas bajo llave y por qué nadie las liberó cuando comenzó el fuego en su interior.
La tragedia en el 'Hogar Seguro Virgen de la Asunción' ha indignado a los guatemaltecos y pone más presión sobre la maltrecha popularidad del presidente del país, Jimmy Morales, cuya familia y partido político --Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación)-- se han visto salpicados por varios escándalos.
Según la versión oficial, el miércoles de la semana pasada las niñas habrían iniciado el incendio tras haber sido encerradas en un pequeño cuarto por amotinarse e intentar escapar del orfanato, que registraba un largo historial de fugas y denuncias de abusos contra los menores.
De acuerdo con las declaraciones del procurador de los Derechos Humanos de Guatemala, Jorge de León, los trabajadores del albergue "dan información de que había más o menos ocho o 10 personas frente al cuarto, quiénes eran los responsables porque las metieron allí".
Por otro lado, las supervivientes del incendio dijeron a los investigadores que pidieron ayuda cuando se inició el fuego pero que no fueron rescatadas, según unas grabaciones publicadas esta semana por el medio local 'Nómada'.
Tras pedir auxilio una de las agentes dijo "que sufran esas desgraciadas, que así como habíamos sido buenas para fugarnos, que fuéramos buenas para aguantar el dolor", relató una de las afectadas desde el hospital en el que se encuentra recuperándose.
Por su parte, León dijo que todavía se desconoce por qué nadie las auxilió a tiempo pese a los gritos y que habrá que esperar a que avancen las investigaciones para "determinar la responsabilidad de la llave de ese candado, que es la gran interrogante".
"Si las personas estaban allí, frente a la habitación, era imposible no escucharlas", indicó el funcionario al describir la habitación donde encerraron a las menores, construidas con paredes de bloque y ventanas con barrotes.
La tragedia provocó la destitución y arresto de tres funcionarios de la Secretaría de Bienestar de la Presidencia, encargada del centro de menores, quienes fueron acusados de homicidio culposo, incumplimiento de deberes y maltrato de menores de edad. No obstante, los acusados se han declarado inocentes.
Pese a estas detenciones, cientos de guatemaltecos protestaron esta semana en las calles de la capital, exigiendo justicia para las niñas al grito de "Fue el Estado" y atando crespones negros en las puertas de la casa presidencial.
"El guatemalteco cada día está más desesperado y furioso porque el Estado todavía no da respuesta", dijo León. "(Esto) hace que las instituciones sigamos teniendo poca credibilidad ante la población", concluyó el procurador.