Actualizado 26/02/2017 07:24

Mario Poggi, el psicólogo justiciero de Lima

Mario Poggi
YOUTUBE

   LIMA, 26 Feb. (Notimérica) -

   La historia del descuartizador de Lima está relacionada con un personaje de la cultura popular de Perú. Durante los últimos meses de 1985 muchos cadáveres desmembrados eran encontrados por la policía en descampados, las investigaciones condujeron a la conclusión que el autor de los homicidios era el interno Ángel Díaz Balbín pero, a falta de pruebas, necesitaban su confesión.

   La policía contrató los servicios del psicólogo Mario Poggi quién había realizado un curso sobre psicología criminal, en años anteriores, para la policía de Lima. El analista aceptó el reto de entrevistar al imputado, con el objetivo de obtener una confesión que permitiera encarcelarlo.

   Al cabo de una semana de pruebas e intimidaciones a Díaz Balbín el psicólogo no logró confesión alguna. En un estado de desesperación, Mario Poggi 'vendió' la exclusiva sobre el 'descuartizador de Lima' a una revista de variedades de la capital peruana. Con el objeto de poner nervioso a Balbín y obtener así su confesión, pero este intento también resultó estéril.

   Al igual que la policía, Poggi estaba convencido de que Díaz Balbín era el descuartizador de Lima y, por lo tanto, el autor de las muertes, por lo que, ante el temor de que el juez decretase su libertad por falta de pruebas y la imposibilidad de obtener su confesión, decidió ahorcarlo durante una de las sesiones que tenía con él en la misma prisión.

   A partir de ese momento el psicólogo se enfrentó a la justicia peruana y pagó con cinco años de cárcel su crimen. Cuando fue puesto en libertad se autodenominó 'loco' e inició una serie de entrevistas en los medios de comunicación en las que ofreció discursos disparatados.

   Posteriormente se tiño el cabello de color verde y cuando se acabó su popularidad se dedicó a deambular por el Parque Kennedy de la capital. Ahí vendía a los transeúntes los libros que había publicado, 'Mi primer pijazo', 'Yo solo sé que soy un imbécil' y 'Años 1990: El decálogo de la correa vengadora'.

   En 2006 se autoproclamó candidato a la Presidencia de Perú y de nuevo, los medios informativos, se centraron en él. El tiempo y la población se encargaron de reducirlo a 'loco de parque'. Ocasionalmente alguna productora independiente acudía a sus ocurrentes dilucidaciones sobre la situación política o social de Lima hasta el día de su muerte, el 26 de febrero de 2016.