Actualizado 29/03/2017 17:14

El nuevo cártel que amenaza a México y a 'El Chapo' Guzmán

   CIUDAD DE MÉXICO, 12 Oct. (Reuters/Notimérica) -

   En apenas cuatro años, un grupo criminal poco conocido ha crecido en México hasta desafiar al capo del narcotráfico más célebre del mundo, Joaquín 'El Chapo' Guzmán, generando una nueva oleada de violencia y corrupción entre las autoridades.

   Tras estar en un pasado a las órdenes de el Cártel de Sinaloa, liderado por 'El Chapo', el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se rebeló contra sus amos, apoderándose de territorios y comprando a miles de policías corruptos.

   Con el expolicía Nemesio Oseguera, alias 'El Mencho', como cabecilla, el cártel forjó un imperio a expensas de rivales más débiles. La velocidad de su ascenso muestra cómo de rápido puede cambiar de manos el poder en el multimillonario negocio de las drogas en México.

   Con intereses desde China hasta el norte de África y Europa del este, el sangriento avance del CJNG ha llevado los asesinatos a sus mayores niveles bajo la administración del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, quien juró restaurar la ley y el orden cuando asumió el cargo en diciembre de 2012.

   De la lista de los 37 capos más buscados de México en el 2009, sólo cuatro no están muertos o en la cárcel. Así, el resurgimiento de la violencia que llevó la cifra de homicidios a 3.800 entre julio y agosto puso en evidencia el fracaso del Gobierno en derrotar a los cárteles y en evitar que nuevas organizaciones tomen su lugar.

Intimidando, sobornando o directamente atacando a la Policía, los líderes del CJNG han aplicado despiadadamente las lecciones aprendidas bajo el mando del Cártel de Sinaloa para sacar a la fuerza a rivales debilitados y arrebatarles rutas de tráfico, según expertos de seguridad.

   Entrevistas de 'Reuters' con más de una decena de policías en servicio o retirados explican hasta qué punto la colusión entre miembros de la banda y las fuerzas del orden en el estado occidental de Jalisco, bastión del cártel, sentó las bases para el avance de la organización.

"La gente dejó de confiar en la Policía. La gente creía y percibía que la policía del estado servía a un grupo delictivo", dijo el fiscal general de Jalisco, Eduardo Almaguer.

   También se han visto afectados por el caos los puertos y cruces de frontera que dan cuenta del rastro de miles de millones de dólares en metanfetaminas enviadas desde México a Estados Unidos, la principal fuente de ingresos del CJNG.

   El CJNG, salvaje --un sicario de la banda filmó la explosión de víctimas a las que les había atado dinamita-- y astuto, tiene como uno de sus pilares principales el brazo financiero, liderado por los hermanos Valencia, conocidos como 'Los Cuinis'.

   "Son los empresarios. Ellos han hecho grandes inversiones en desarrollos inmobiliarios, en restaurantes, en arrendadoras de vehículos. Ellos son los que saben hacer negocios y corromper también a autoridades", dijo Almaguer.

   El fiscal ha despedido a decenas de funcionarios estatales sospechosos de corrupción desde que asumió el cargo en julio del 2015, pero es sobre las policías municipales que recae la mayor responsabilidad en Jalisco, estado que alberga a la segunda ciudad más grande de México, Guadalajara.

   "Casi uno de cada cinco policías municipales colabora activamente con los cárteles y cerca de un 70 por ciento no actúan contra ellos", aseguró Almaguer.

   Hasta septiembre, 1.733 policías en servicio en Jalisco --lo que equivale a casi el 16 por ciento de la fuerza municipal--, ha reprobado las evaluaciones conocidas como "controles de confianza" dirigidas a erradicar la corrupción, según datos recopilados por 'Causa en Común', una organización a favor de la transparencia.

   El peor desempeño lo tuvo Sinaloa, tierra natal de 'El Chapo', donde la mitad de los policías activos reprobaron la evaluación.

LA POLICÍA, CONTROLADA POR EL CÁRTEL

   La corrupción de la Policía, cuyo sueldo ronda únicamente los 00 dólares mensuales en algunas regiones, ha sido un problema en México desde hace mucho tiempo.

   En este marco, los sobornos de los cárteles resultan aún más tentadores. De hecho, un integrante de esta banda afirmó que tenían "a la mitad de la Policía de Jalisco en su nómina".

   Dependiendo de su rango, el CJNG pagaba a los policías entre 1.000 y 50.000 pesos mexicanos (entre 52 y 2.600 dólares) al mes o más, dijo el oficial, quien pidió el anonimato.

   No obstante, este método sufrió un pequeño revés en 2015, cuando el CJNG comenzó a sospechar que las policías locales estaban cediendo a presiones del Cártel de Sinaloa para traicionarlos y cambiar de bando, la banda arremetió contra las fuerzas de seguridad.

   En seis semanas, el CJNG mató a más de dos docenas de policías en un ataque que culminó con el derribo de un helicóptero del Ejército el 1 de mayo de 2015.

   Desde octubre del pasado año, cuando la oposición de izquierda comenzó a gobernar Guadalajara, "alrededor del diez por ciento de sus 2.600 agentes han sido o están en proceso de ser despedidos debido a sus posibles vínculos con el crimen organizado", informó el jefe de la Policía, Salvador Caro.

   No obstante, el CNJNG no es el único cártel que "emplea policías". Documentos recuperados por agentes locales y revisados por Reuters mostraron que el Cártel de los Caballeros Templarios, uno de los principales rivales locales del CJNG, tenía copias de archivos de inteligencia con datos de sospechosos del CJNG, incluyendo policías.

    Al respecto, el fiscal general Almaguer dijo que los problemas no se concentran sólo en la Policía, si no que también involucra a los jueces.

   "Hemos encontrado resoluciones donde es evidente que se busca proteger a los integrantes de estos grupos delictivos por parte de unos malos integrantes del poder judicial", dijo Almaguer.

EL PODER DEL CRISTAL

   El CJNG surgió con células del grupo de Ignacio 'Nacho' Coronel, principal lugarteniente de Guzmán asentado en Jalisco, quien fue abatido por fuerzas federales en el 2010.

   En septiembre del 2011 hicieron su irrupción bajo el nombre de 'Matazetas' cuando dejaron más de 30 cadáveres en una avenida principal de Boca del Río, zona metropolitana del puerto de Veracruz, donde operaba el sanguinario cártel de 'Los Zetas'.

   Según analistas, el Cártel de Sinaloa utilizaba a los 'Matazetas' para combatir a uno de sus principales enemigos. En algún momento este grupo se salió del cártel, pero no fue hasta después de la captura de Guzmán en febrero del 2014 --escapó de prisión en julio del 2015 y fue recapturado en enero de este año-- que la división degeneró en una guerra.

   Para abril de 2015, un mapa de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) mostró a la banda como dominante en la mayoría o en parte de diez estados, con una creciente presencia en otros cuatro.

   Desde entonces, la marejada del CJNG ha provocado niveles récord de homicidios en torno a los puertos del Pacífico, que alimentan la demanda de la banda por precursores químicos provenientes de China para fabricar metanfetaminas.

   Su poder también ha acrecentado la violencia en Veracruz, con costas en el Golfo de México, la mayor puerta para las exportaciones de metanfetaminas a Europa y el norte de África, mientras que algunos expertos consideran que también es el principal proveedor de mentanfetaminas en Estados Unidos.

   Al respecto, el exjefe de operaciones internacionales de la DEA Mike Vigil, cree que la división está todavía "alrededor del 60 por ciento a favor y el 40 por ciento en contra del Cártel de Sinaloa", en un mercado controlado "completamente" por ambos grupos.

   Vigil dijo que la base de poder del CJNG y la absorción de experiencia local implican que el grupo tiene la capacidad de convertirse en la nueva "superpotencia" del segmento de las metanfetaminas.

   "Tienen un doctorado en tráfico de drogas gracias a la educación provista por el Cártel de Sinaloa y otros cárteles", sentenció.