BUENOS AIRES, 23 May. (Notimérica) -
Los jueces argentinos Horacio Piombo y Benjamín Sal Llargués también redujeron la pena a un taxista que había abusado, agredido y robado a tres pasajeras en 2006, con el argumento de que no había llegado al extremo de matar a sus víctimas.
Después de que la semana pasada se conociera que los jueces habían reducido la pena al abusador de un niño de 6 años por considerar atenuantes que el niño "era gay" y que "estaba habituado a que lo abusaran", ahora se ha revelado que en 2014 le redujeron la pena al violador de tres mujeres.
El hombre era un taxista que en 2006 cometió tres violaciones con similar 'modus operandi': subía pasajeras a la salida de conciertos, les robaba amenazándolas con un destornillador o un cuchillo y después las llevaba a los bosques de Ezeiza, donde las violaba.
En 2009 fue condenado a 38 años de prisión por los crímenes, pero en 2014 la causa llegó al tribunal de Piombo y Sal Llargués, quienes redujeron la pena del violador serial a 25 años con el argumento de que no había matado a sus víctimas.
"La pena que le habían aplicado es excesivamente severa, teniendo en cuenta que no gravitan ilícitos tales que impliquen la muerte de una persona", señalan los jueces en su polémico fallo.
A los casos del abusador del niño de 6 años y del violador serial, además, se suma la reducción de pena que aplicaron a un pastor evangélico que había violado a sus dos hijas adolescentes --una de las cuales quedó embarazada-- con el argumento de que eran pobres y ese "nivel social acepta relaciones a edades muy bajas".
JUICIO ACADÉMICO Y POLÍTICO
Todos estos casos están creando gran revuelo en Argentina y numerosas voces se han sumado en contra de los jueces, los cuales tendrán que afrontar un juicio político por la reducción de pena al pastor evangélico en 2011.
El representante regional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Amerigo Incalcaterra, criticó esta semana que los argumentos de los jueces en el fallo del abusador del niño "estigmatizan y discriminan al niño que ha sufrido el abuso sexual".
"Desconocen un derecho fundamental reconocido en la Convención sobre los Derechos del Niño, como lo es la protección contra toda forma de perjuicio o abuso físico o mental, incluido el abuso sexual, que tiene que brindar el Estado en su conjunto sin distinción alguna", criticó Incalcaterra en un comunicado.
En las instituciones educativas en las que trabajan los jueces, la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) en el caso de Piombo, y la Universidad de Buenos Aires (UBA) en el caso de Sal Llargués, se han presentado pedidos de juicio académico para expulsar a los jueces, tras movilizaciones estudiantiles.
La Dirección de Derechos Humanos de la UNLP expresó en un comunicado su "preocupación" por que Piombo sea "formador de las generaciones venideras de profesionales del Derecho".
Tanto la UNLP como la UBA han convocado en los próximos días a un Consejo Directivo extraordinario para considerar la posibilidad de cursar los juicios académicos solicitados.
Al mismo tiempo, la Corte Suprema de la provincia de Buenos Aires acaba de abrir el juicio político que estaba pendiente contra los dos camaristas.
El pasado lunes, Piombo se defendió en el canal TN diciendo que "desde el 2011 estamos sometidos el doctor Sal Llargués y yo para que renunciemos, es un tema político, entonces nos buscan cualquier cosa".