LIMA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Gregorio Santos, activista antiminero y ex gobernador provincial, ha abandonado este miércoles la cárcel de Lima en la que estaba recluido desde hacía dos años tras exceder el plazo legal para permanecer en prisión preventiva.
"La primera cuestión es saludar al país y a mis paisanos de (la provincia peruana de) Cajamarca por la solidaridad que han expresado en una lucha por la conquista del respeto al Estado de Derecho y la democracia", ha dicho nada más abandonar la cárcel de Ancón, en Lima.
"Yo solo estoy recuperando lo que nunca me debieron quitar: el derecho a defenderme en libertad", ha proclamado, al tiempo que ha advertido de que "el Estado se ha convertido en una dictadura" porque utiliza la prisión preventiva de forma "arbitraria" y como "venganza política".
Santos fue detenido en junio de 2014 por las supuestas corruptelas cometidas durante los cuatro años que estuvo al frente del Gobierno de Cajamarca. Pero el martes la Sala Penal Nacional denegó la petición de la Fiscalía para prorrogar siete meses la prisión preventiva y ordenó su puesta en libertad.
A pesar de este fallo favorable, la Sala ha impuesto a Santos una serie de condiciones que, en caso de incumplimiento, determinarán su regreso a prisión. No podrá cambiar de domicilio sin previo aviso y tendrá que ingresar una fianza.
Santos es uno de los políticos más populares de Perú, pese a las acusaciones de corrupción en su contra, por su firme oposición al proyecto aurífero de la empresa Newmont Mining, que obligó a suspender tras las masivas protestas de 2011.
El ex gobernador de Cajamarca --que ahora podría recuperar el cargo tras someterse a un proceso administrativo-- se presentó a las últimas elecciones presidenciales y obtuvo un cuatro por ciento de los votos, de acuerdo con los resultados oficiales.