Publicado 26/04/2015 18:42

El robo de niños en México: un problema grave y un delito poco perseguido

Un niño camina por Ciudad Juárez, México, delante de mural con un niño armado
STRINGER MEXICO / REUTERS

MÉXICO DF, 26 Abr. (Notimérica) -

El robo de hijos por los propios padres está constituyendo un fenómeno recurrente en los Estados Unidos Mexicanos que ha registrado en los últimos siete años 2.975 denuncias por sustracción internacional de menores, cerca de 400 al año de media, que incluyen tanto a niños extraídos ilegalmente de México como aquellos que son reclamados por alguno de sus padres desde otro país, según los datos proporcionados por la Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE).

El informe al que ha tenido acceso el diario mexicano 'El Universal', explica que la SRE tiene activos 587 procesos de menores en esta situación: 391 son niños mexicanos de otros países y 196 son menores retenidos en México. Estas cifras del SRE se adecuan a los contabilizados por las organizaciones especializadas en este fenómeno.

En los casos como la sustracción internacional, México es firmante del convenio de la Haya 'Aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de Menores' y los datos de la SRE afirman que 421 niños fueron víctimas de rapto ilegal en 2014, de los cuales 164 fueron retenidos en México (los casos de niños reclamados por uno de sus progenitores desde otro país) y 257 fueron llevados al exterior.

Mensualmente, un promedio de 21 menores de edad es sacado ilegalmente de la nación por uno de sus padres y en cuatro de cada 10 casos de sustracción, uno de los padres no vuelve a saber nunca de su hijo, tal como explica el fundador de la Asociación Mexicana de Padres de Familia Separados (AMPFS), Alejandro Heredia.

Los cinco países de destino de niños sustraídos ilegalmente son: Estados Unidos con 211 casos en 2014, España con 10, Canadá con siete, Colombia con seis y, finalmente, Francia con tres casos de menores.

La directora de Conexión Familia, organización colombiana de asesoría jurídica que ha trabajado en varios casos de sustracción parental colombianas-mexicanas, ha explicado que " México es una puerta abierta para la sustracción y retención ilegal internacional porque no existe el doble permiso que sí exigen los países firmantes de la convención de la Haya".

Este doble permiso significa una autorización que debe estar ratificada por ambos padres que aceptan así la salida legal del niño del país. En la República de México este permiso no existe, la legislación civil mexicana admite que el menor viaje acompañado por un de los padres para abandonar el país.

A la facilidad de salida de los menores, se suma que son los propios padres afectados, y no las autoridades, quienes emprenden la búsqueda de sus hijos. Y la investigación preliminar privada puede costar entre 30 y 50.000 pesos (2.000 y 3.000 dólares).

"La autoridad no se toma en serio la restitución del niño con ambos progenitores. Y en casos internacionales, sólo se interviene en el proceso de repatriación cuando el niño ya está ubicado", ha añadido el director de la AMPFS, Alejandro Heredia.

La sustracción de hijos es un problema grave que no está siendo atendido por las autoridades federales, según coinciden organizaciones no gubernamentales como la Asociación Mexicana de Niños Robados y Desaparecidos, la Fundación Nacional de Investigaciones de Niños Robados y Desaparecidos, ¿Y quién habla por mí?, Asociación Mexicana de Padres de Familia Separados, Papás por Siempre y Mujeres nunca más otra injusticia.

Víctimas como expertos consultados por 'El Universal' han denunciado que el mayor problema en los casos de sustracción radica en la ineficacia de los juzgados de familia, la poca seriedad en la búsqueda y la pasividad para restituir a los menores con su padres. El porcentaje de niños raptados por un pariente equivale a un 60 y 70 por ciento del total a nivel nacional y éste es el delito menos perseguido por las autoridades.