CIUDAD DE MÉXICO, 22 Jun. (Notimérica) -
En 2016, los ingresos de la producción de aguacates en México superaron a los del sector petrolero. En este sentido, el lucrativo negocio del aguacate se ha convertido en el nuevo foco de las mafias mexicanas.
En el municipio de Tancítaro, ubicado en el estado mexicano de Michoacán, se producen cuatro quintas partes de la producción total de aguacates de México en las 22.000 hectáreas certificadas para su producción.
Por este motivo, varios cárteles de este estado mexicano extorsionan a los agricultores, a quienes se les hace pagar desde 50 dólares hasta el 50% de las ganancias totales de la cosecha al año para pagar el "derecho de piso".
No obstante, la asociación local de cultivadores denunció les hechos provocando que los "pistoleros civiles del aguacate" patrullen los cultivos y así, recobrar la actividad de agrícola de los mexicanos, según ha informado 'Actualidad RT'.
Uno de los principales importadores de aguacates mexicanos es EE.UU, país que durante la Super Bowl importa cerca de 100.000 toneladas, lo que supone el 12% del consumo anual.
A pesar de que México es el principal productor y exportador del aguacate a nivel mundial, la abrumadora subida de precio de la fruta mexicana, que llega a venderse a cinco dólares el kilogramo, ha provocado que sea uno de los productos más difíciles de conseguir por su precio para los mexicanos.
