Actualizado 18/03/2016 19:37

¿Qué supone que Chile despenalice el aborto en tres supuestos?

Demonstrators raise their thumbs in approval during a rally inside congress in f
RODRIGO GARRIDO / REUTERS

   MADRID, 18 Mar. (Notimérica) -

   Chile es uno de los países donde el aborto está penalizado en todos los supuestos. Esta ley se dictaminó poco antes de que finalizase la dictadura de Augusto Pinochet, en 1989, ya que hasta entonces el aborto terapéutico estaba permitido en el país.

   En 2012, el Ministerio Público de Chile registró 125 casos de delitos de aborto en distintas hipótesis, es decir, el realizado por la mujer sola o asistida, el aborto realizado por un profesional de la salud o el aborto no consentido por la mujer.

   Sin embargo, en ese mismo año, según un estudio de la Universidad Diego Portales (UDP) con datos de la Gendarmería chilena, el número de mujeres recluidas por delitos de aborto era menor al de los hombres, 89 hombres frente a 5 mujeres. No obstante, en el total de la población bajo vigilancia por estos delitos, los hombres representan una proporción menor a las mujeres.

   Ahora, tras 26 años de democracia, el Gobierno de Michelle Bachelet intenta despenalizar el aborto en tres causales. Este jueves, la Cámara de Diputados chilena aprobó un proyecto de ley que despenaliza el aborto en los supuestos de violación, riesgo para la vida de la madre y malformación del feto.

   Por 66 votos a favor y 44 en contra, los diputados han respaldado esta iniciativa, que aún tiene que ser aprobada en el Senado y que podría resolver abortos clandestinos que se realizan en condiciones de riesgo.

   De ser aceptado, este proyecto de ley permitirá la interrupción voluntaria del embarazo en caso de que la gestación suponga un peligro para la vida de la mujer o si el feto padece una alteración estructural congénita o genética de carácter letal, en cuyo caso el diagnóstico deberá ser ratificado por un médico especializado.

   Además, el aborto estaría permitido en el supuesto de que el embarazo fuera el resultado de una violación. Esta interrupción solo se podrá realizar antes de las 12 semanas de gestación, excepto en el caso de las menores de 14 años, que podrán abortar hasta las 14 semanas con autorización de un representante legal, según informa el diario chileno 'La Tercera'.

   Asimismo, si la mujer es mayor de 18 años y no ha denunciado el delito de violación, el responsable del centro sanitario deberá denunciar el delito al Ministerio Público para que se investigue a los responsables.

   Por otra parte, las adolescentes de entre 14 y 17 años podrán manifestar por sí mismas su voluntad para interrumpir su embarazo, pero su representante legal o uno de ellos a su elección --si hubiera más de uno-- deberá ser informado de esa decisión.

   En lo que se refiere a los profesionales sanitarios, la enmienda establece que los médicos podrán abstenerse de interrumpir un embarazo siempre que hayan manifestado, previamente y por escrito, su objeción de conciencia al director del hospital. De esta forma, el responsable del centro deberá asignar otro médico a la paciente o derivarla a otra clínica.

   La ministra del Servicio Nacional de la Mujer (SERNAM), Claudia Pascual, después de la votación en la Cámara, manifestó que este proyecto es "un claro avance en el respeto de los derechos a las mujeres" y "repone derechos que antes fueron negados".

   Además, aclaró que esta iniciativa "abre opciones y no impone posiciones", y espera que la tramitación en el Senado no se demore.

   Si esta institución desea hacer modificaciones en el proyecto aprobado por la Cámara, el texto deberá regresar a esa instancia en su tercer trámite constitucional. Si los diputados no están de acuerdo con los cambios del Senado, el proyecto pasará a una comisión mixta que zanjará los puntos que obstaculicen el debate.