Actualizado 28/07/2015 22:11

Batalla campal entre gendarmes y autobuseros argentinos

Huelga en Argentina
Foto: REUTERS

   BUENOS AIRES, 28 Jul. (Notimérica) -

   Los enfrentamientos entre la Gendarmería argentina y los conductores de la línea 60 de autobuses de Buenos Aires se han saldado con varios heridos y detenidos, en el culmen de la protesta sindical que mantiene esta línea de autobuses, en paro desde hace semanas.

   La batalla campal entre gendarmes y chóferes se produjo en la autopista Panamericana durante la mañana del martes, cuando los conductores pretendían cortar dicha autopista a modo de protesta.

   Durante los disturbios hubo un intercambio de balas de goma, pedradas y botellazos que se saldaron con varios heridos, entre ellos, conductores, gendarmes y también algún periodista, además de varios detenidos.

   Según el delegado gremial de los chóferes, Iván Iza, hay 20 autobuseros heridos y siete detenidos. Asimismo, Iza declaró que "estamos aquí y no nos vamos a mover", aunque habrá una reunión de mediación con el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Alejandro Granados.

EL CONFLICTO.

   Los conductores de la línea 60 de Buenos Aires llevan varias semanas sumergidos en un conflicto gremial con su empresa que no parece tener fin.

   Por ello, incluso el Gobierno de la provincia de Buenos Aires se ha ofrecido a mediar, tras los intensos enfrentamientos con la Gendarmería Nacional.

   El inicio de la disputa entre la empresa concesionaria y los conductores se produjo tras el despido de un chofer de la línea el pasado mes de febrero, con motivo de un accidente de tráfico en el que hubo varios heridos, entre ellos, una mujer embarazada.

   A raíz del despido, el resto de compañeros de la línea, a modo de protesta, permitieron a los pasajeros entrar a los autobuses sin pagar billete. Tras esta medida, la empresa decidió despedir en masa a un total de 52 autobuseros.

   A eso se le suma que los trabajadores de la empresa piden explicaciones a la directiva por un supuesto manejo fraudulento de los subsidios que el Estado otorga a la empresa por cada autobús contratado.

ROBO DEL SUBSIDIO PÚBLICO.

   "Acá hay un robo del subsidio público. La empresa tiene 340 autobuses, cobra 100.000 pesos (más de 10.000 dólares) por vehículo al mes, saca a la calle 244 autobuses de los 340 y deja 96 parados. Por eso los pasajeros de provincia muchas veces tienen que esperar al autobús 40 minutos", denunció a Infobae el delegado de la línea 60, Néstor Marcolín.

   Sin embargo, la empresa alega que el despido del autobusero se hizo en regla, ya que, cuando se produjo el choque que dejó a cuatro personas heridas, conducía a una velocidad por encima de la permitida.

   Además, la compañía argumentó que, en los últimos tres años, ese conductor ha tenido 13 accidentes, si bien eran de menor gravedad.

   El Ministerio de Trabajo, sin embargo, obligó a la empresa a reincorporar al conductor, pero la compañía --aunque cumplió con esa parte-- decidió no dejarle conducir más, a raíz del conflicto desatado por el resto de sus compañeros.

   Ahora, además, la empresa ha amenazado a todos los trabajadores que están secundando la protesta con no pagarles el sueldo de este mes. Marcolín, de forma lapidaria, señaló: "Cada paso que dan, apagan el fuego con gasolina" y reclamó la reincorporación de los 53 autobuseros.