MADRID, 8 Sep. (TRENDSmérica) -
Hablar del jardín Majorelle, situado en la ciudad marroquí de Marrakech, es hablar de exuberancia y resplandor. Es hablar de luz, naturaleza, sol, verde infinito y diversidad, de lo exótico y por qué no, de lo excéntrico.
No es de extrañar entonces que Yves Saint Laurent y Pierre Bergé, apasionados por este lugar, hayan comprado la magnífica creación de Jacques Majorelle.
Fue allí, en Marruecos, en el mismísimo Jardín de Majorelle donde la firma española David Christian Madrid encontró la inspiración para cerrar su colección primavera/verano 2016 presentada en el Palacio de Cristal, en Madrid, España. De esta forma DC reprodujo las fuentes, paredes y el suelo del enigmático jardín para la pasarela del MFSHOW.
Este viaje que propone DC nos transporta al exotismo que envuelve las tardes de sol con rayos que llenos de matices anaranjados y rojizos, perfectos y dignos de ser retratados en un cuadro.
Paloma Chacón y María Roca, diseñadoras de DC han jugado con lo que este país despierta. "Cinco sentidos que inspiran el camino de las mujeres más sofisticadas".
Colores vibrantes, con tonalidades del verde, azul, rosa, lila, púrpura y amarillo, que aportaron elegancia a los vaporosos vestidos, sedas y blusas en viscosa y fibra sintética.
Un pequeño paso, tal vez, de una presentación singular que insinúa la danza del vientre y sus siete velos.
Las pashminas dan lugar a sensuales y delicados vestidos con estampados geométricos, un resultado misterioso y encantador que lleva a todos a las entrañas de las 'Mil y una noches'. Este juego seductor triunfa porque el universo de este pequeño lugar es tan envolvente que resulta imposible darse cuenta de lo ensimismado que se está.