MADRID, 5 Jul. (TRENDSmérica) -
El huracán del block color sigue pisando fuerte, así que los recelosos monocromáticos que aún no lo hayan probado no tardarán en cambiar de opinión.
Aunque algunos puedan tildarlo de excesivo, cantoso o llamativo, la sencillez del look que presentamos es un verdadero must have de todo armario con estilo y, sin duda, favorece a cualquier persona.
Se trata de un outfit compuesto normalmente por dos piezas, un top o blusa y una falda o pantalón largo. Todas las piezas deben ser lisas, pero de tonos vivos y muy llamativos.
Para los más discretos el look se compone de una pieza de color llamativo, que puede ser un abrigo o un jersey y el resto de color negro u otro tono neutro.
En ese sentido, también se pueden combinar varias piezas pero no demasiado llamativas de un modo más tímido, como el de la foto.
Los que sean algo menos prudentes pueden combinar varias piezas y utilizar en su outfit el conjunto de tres colores por separado. Basta con que uno de ellos sea más llamativo y siempre liso, complementos a parte.
Para los más atrevidos, lo fundamental es casar las piezas más atrevidas que estén de forma consecutiva en la gama cromática o justo lo contrario, que sean totalmente opuestas. Así, puedes casar el naranja ácido con el verde hierba o con el rojo, o el azul con el cámel o el verde hoja, hay muchas posibilidades.
El truco es elegir tonalidades fuertes y lisas, y confiar en el arte que llevas puesto, una tendencia que no entiende de estaciones y que gusta con lluvia, con sol, con frío y con calor.
