Foto: AGENCIA BRASIL
BRASILIA, 24 Dic. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha sobrevolado este martes las zonas afectadas por las lluvias torrenciales que han caído los últimos días sobre el estado de Espíritu Santo, dejando 14 muertos, 45 heridos y más de 46.000 desalojados.
Rousseff ha llegado alrededor de las 9.50 (hora local) a Espíritu Santo para subirse a un helicóptero militar desde el que ha constatado los daños causados por las intensas precipitaciones en los municipios del estado brasileño.
La líder izquierdista ha sobrevolado Espíritu Santo acompañada de su gobernador, Renato Casagrande, de varios de sus ministros y de altos cargos de las Fuerzas Armadas de Brasil, que le han informado de la situación.
Tras ello, alrededor de las 10.40, Rousseff ha participado en una reunión de coordinación que se ha celebrado en la capital de Espíritu Santo, Vitória, y ha durado una hora y cuarto, según ha informado la cadena brasileña 'O Globo'.
"A lo largo de mi Presidencia he visto inundaciones en algunos estados, como en Maranhao, pero la cantidad de agua que he visto aquí, en Espíritu Santo, es impresionante", ha dicho en unas breves declaraciones a la prensa.
Rousseff ha expresado su "solidaridad" con las víctimas y ha destacado el apoyo del pueblo brasileño a Espíritu Santo. "Permitirá hacer algo más confortable un momento tan difícil como este", ha considerado.
Más allá de las palabras de aliento, no ha anunciado el envío de ayuda federal, limitándose a destacar el "esfuerzo" de su Gobierno para prevenir estas situaciones mediante la creación del Centro Nacional de Control de Desastres Naturales.
Sin embargo, ha través de su cuenta oficial en la red social Twitter ha informado de que se han enviado kits de emergencia con medicamentos, productos de higiene y limpieza, mantas y ropa a Espíritu Santo.
Además, ha indicado que el Gobierno ha puesto a disposición de las autoridades regionales dos helicópteros y diez vehículos con una capacidad de carga de cinco toneladas, así como efectivos de Protección Civil y la Fuerza Nacional y geólogos.
De acuerdo con el último balance divulgado por el Gobierno de Espíritu Santo, las lluvias torrenciales, que comenzaron el fin de semana, han dejado un balance de 14 muertos, 45 heridos y más de 46.000 desalojados.