MADRID 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El piloto de motociclismo Pol Espargaró se proclamó esta madrugada campeón del mundo en Moto2, un primer título en esta categoría tras el que manifestó que "un Mundial sin haberlo sudado, no sabe igual".
Una alegría que su novia, Carlota Bertrán, compartió con el joven piloto de 22 años, un apoyo sin el que Espargaró no había conseguido cumplir su sueño de ser campeón. La joven casi nunca se separa de su novio, al que acompaña en todos las carreras que puede, convirtiéndose en un verdadero talismán para el piloto.
Ya sabemos que Pol Espargaró es un chico muy sensible, tras confesar en una entrevista que había llorado por amor. Ahora, su novia llena su cuenta personal de Instagram de imágenes de ambos juntos en las que se les ve muy felices, demostrando que el piloto también puede sonreír cuando está enamorado.
"No he pensado al cruzar la meta, he tratado de parar el momento", confesó el piloto al bajar de la moto, ya como campeón, en el circuito japonés de Motegi, añadiendo su agradecimiento "a toda la gente que me ha ayudado durante todo este tiempo porque ha sido mágico". Un agradecimiento en el que seguro que Carlota Bertrán ocupa un lugar muy importante.