MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
China ha lanzado su primera misión de retorno de muestras de asteroides, Tianwen-2, con destino al asteroide 2016HO3. También explorará el cometa 311P, ubicado en el cinturón principal, más allá de Marte.
Un cohete Larga Marcha-3B despegó del Centro de Lanzamiento de Satélites de Xichang, en la provincia suroccidental china de Sichuan, a la 1.31 AM (hora de Pekín). Unos 18 minutos después, la sonda Tianwen-2 fue enviada a una órbita de transferencia de la Tierra al asteroide 2016HO3, según la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA). La nave espacial desplegó sus paneles solares sin problemas y la CNSA declaró el lanzamiento un éxito.
FÓSILES CÓSMICOS
Conocido como un cuasi-satélite de la Tierra, el asteroide 2016HO3 orbita el Sol y parece girar también alrededor de la Tierra, manteniéndose como un compañero constante de nuestro planeta.
Conocido como "fósiles cósmicos", los asteroides preservan información crucial sobre la infancia del sistema solar, según los científicos, informa Xinhua.
Los asteroides también aportan información crucial sobre la historia evolutiva de la Tierra. Una hipótesis sostiene que el agua de la Tierra fue traída por pequeños cuerpos celestes. Sus colisiones catastróficas con nuestro planeta, como la que extinguió a los dinosaurios, han moldeado profundamente la evolución terrestre, afirmó Liu Jianjun, diseñador jefe adjunto de la misión Tianwen-2 e investigador de los Observatorios Astronómicos Nacionales de la Academia China de Ciencias.
El segundo objetivo, 311P, una anomalía celeste descubierta en el cinturón principal de asteroides entre Marte y Júpiter, ocasionalmente expulsa materiales y se asemeja a un cometa con cola. Su descubrimiento desafía la comprensión convencional de los astrónomos sobre los cometas, ya que la región está demasiado cerca del Sol como para que un cometa retenga sus materiales volátiles, como el hielo de agua.
Los científicos aún no están seguros de si los cometas del cinturón principal se originaron en el cinturón de asteroides o en los confines del sistema solar.
ELEGIDO POR SU ÓRBITA ESTABLE
Al explicar por qué se eligió el asteroide 2016HO3 para el muestreo, Han Siyuan, subdirector del Centro de Exploración Lunar e Ingeniería Espacial de la CNSA y portavoz de la misión Tianwen-2, afirmó que este asteroide tiene una órbita relativamente estable, lo que requiere un menor consumo de energía para que las naves espaciales lo alcancen, a la vez que permite un escenario viable para la posterior exploración del cometa 311P, perteneciente al cinturón principal.
Se espera que la misión Tianwen-2 impulse la comprensión del origen, la evolución y las características de estos dos tipos de pequeños cuerpos celestes, afirmó Han.
Científicamente, la misión se centra en la medición de los parámetros físicos de ambos objetivos celestes, incluyendo su dinámica orbital, rotación, tamaño, forma y propiedades térmicas.
La misión también investigará la topografía, la composición y la estructura interna de ambos cuerpos celestes, y posiblemente estudiará los materiales expulsados por el cometa, perteneciente al cinturón principal, añadió Han.
Tras el regreso de las muestras a la Tierra, se realizarán análisis de laboratorio para determinar sus propiedades físicas, composición química y mineral, y características estructurales, añadió.
NUEVO PASO EN EL ESPACIO PROFUNDO
Todo el proceso de la misión es complejo. Tras el lanzamiento, la sonda espacial viajará durante aproximadamente un año para alcanzar su primer objetivo, durante el cual realizará maniobras en el espacio profundo y correcciones a mitad de trayectoria hasta situarse a unos 30.000 km de 2016HO3.
La sonda se acercará gradualmente al objetivo, realizando una exploración cercana orbitando y sobrevolando el asteroide para determinar la zona de muestreo, con una estrategia de vuelo y sondeo simultáneos.
Dada la débil gravedad del asteroide, el muestreo plantea desafíos únicos. Una superficie dura puede provocar rebote, mientras que una superficie suelta puede provocar hundimiento.
REGRESO A FINALES DE 2027
Tras completar el muestreo, la sonda regresará a las proximidades de la Tierra. Una cápsula de retorno se separará de la sonda principal y se espera que entregue las muestras a la Tierra a finales de 2027.
La sonda principal continuará su viaje para encontrarse con el objetivo más distante, el cometa 311P, perteneciente al cinturón principal, para llevar a cabo tareas de exploración posteriores.
La sonda está equipada con un conjunto de instrumentos científicos, que incluye cámaras, un espectrómetro de imágenes visibles e infrarrojas, un espectrómetro de emisión térmica, un radar, un magnetómetro y analizadores de partículas cargadas y neutras, así como de eyección.