MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
El cráneo más pequeño de Homo erectus de África y distintas herramientas líticas, excavados en Etiopía, prueban que nuestros ancestros eran física y conductualmente más diversos de lo pensado.
Los hallazgos incluyen un cráneo casi completo de un ancestro humano temprano, estimado hace aproximadamente 1,5 millones de años, y un cráneo parcial de aproximadamente 1,26 millones de años, hallados en el yacimiento de Gona, situado en el triángulo de Afar.
Ambos cráneos, asignados al Homo erectus, se asociaron con ensamblajes de herramientas de piedra Achelense simples de tipo Olduvayense y más complejos. Esto sugiere que H. erectus tenía un grado de plasticidad cultural/conductual que aún no se ha entendido completamente.
El equipo fue dirigido por Sileshi Semaw del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) en España y Michael Rogers de la Universidad Estatal del Sur de Connecticut. Los hallazgos del equipo se publican en la revista Sciences Advances.
Gona se encuentra en el Triángulo Afar de Etiopía, adyacente a las famosas áreas de estudio de Middle Awash y Hadar, donde se encontraron los famosos esqueletos "Ardi" y "Lucy", respectivamente.
El cráneo casi completo fue descubierto en Dana Aoule North (DAN5), y el cráneo parcial en Busidima North (BSN12), sitios que están separados 5.7 kilómetros.
El cráneo parcial BSN12 es robusto y grande, mientras que el cráneo DAN5 es más pequeño y más grácil, lo que sugiere que H. erectus era probablemente una especie sexualmente dimórfica. Sorprendentemente, el cráneo DAN5 tiene el volumen endocraneal más pequeño documentado para H. erectus en África, aproximadamente 590 centímetros cúbicos, probablemente representando una hembra.
El cráneo más pequeño de Homo erectus en África, y las diversas herramientas de piedra encontradas en Gona, muestran que los antepasados humanos eran más variados, tanto física como conductualmente, de lo que se sabía previamente, según los investigadores.
Esta diversidad física se refleja en las tecnologías de herramientas de piedra exhibidas por los artefactos encontrados en asociación con ambos cráneos. En lugar de solo encontrar los grandes picos o hachas esperadas, herramientas de firma de H. erectus, el equipo de Gona encontró tanto hachas bien hechas como muchas herramientas y puntas romas Olduvayense menos complejas.
Es una opinión generalizada que los primeros individuos del género Homo (p.ej., Homo habilis) fueron responsables de la invención de utensilios sencillos de piedra, la Industria Olduvayense, pero con la aparición del Homo erectus hace entre 1,8 y 1,7 millones de años, surgió en África una nueva tecnología de industria lítica llamada Achelense, con grandes instrumentos de corte, como bifaces, con una forma más funcional. Sin embargo, no se han esclarecido todavía las causas, el momento y la naturaleza de esta importante transición hacia el Achelenses hace 1,7 millones de años, y es un tema de debate entre los arqueólogos.
Este estudio llevado a cabo en DAN-5 y BSN-12 ha demostrado de forma evidente que la tecnología olduvayense perduró tras la aparición de los instrumentos achelenses, lo que indica que existía una flexibilidad conductual concreta y una complejidad cultural inherente en Homo erectus, rasgo que no se comprendía ni apreciaba en Paleoantropología.
Como explica en un comunicado Sileshi Semaw, "aunque la mayoría de los investigadores de este campo considera que los útiles achelenses desbancaron a las primitivas herramientas olduvayenses primitivas tras 1,7 millones de años, nuestro estudio demuestra que la industria de tipo olduvayense permaneció inmutable durante todo el Paleolítico".
Por su parte, el coautor Michael Rogers añade que "la mera idea de que una única especie homínida sea responsable de una tecnología de herramientas no se sustenta. La historia evolutiva de los humanos es más complicada".